Ansiedad y dolor de cabeza: relación entre ellos y cómo calmarlos

Sí, la ansiedad puede provocar muchos síntomas, entre ellos, el dolor de cabeza, que es bastante común. La ansiedad puede provocar algunas alteraciones físicas en nuestro cuerpo, como, por ejemplo, una sensación de presión en la cabeza.

Además de la presión en la cabeza, la ansiedad puede provocar otros síntomas, como malestares, sudor frío, falta de aire, aumento de los latidos cardíacos y otros síntomas desagradables.

¿Cómo afecta la ansiedad a la cabeza? La cabeza es una de las partes del cuerpo más sensibles y afectadas por la ansiedad, debido a su gran cantidad de músculos y nervios. Frecuentemente, el pasar mucho tiempo con tensión en esas fibras musculares puede desencadenar dolores de cabeza llamados cefaleas tensionales.

Cuando un individuo se pone ansioso, las fibras musculares reciben una estimulación del sistema nervioso que mantiene esas fibras tensas, de esa manera, la ansiedad es responsable por producir una cantidad considerable de tensión en el cuerpo. Esa sensación puede ocurrir porque la ansiedad hace que los músculos del cuerpo se estiren y provoquen el aumento de la hormona cortisol.

El cortisol es conocido como la hormona del estrés, ya que nuestro cuerpo lo activa en situaciones de lucha, huida y tensión. Cuando un individuo sufre una situación de estrés, el cortisol se encarga de preparar el cuerpo para una respuesta de huida. Esa respuesta al estrés a largo plazo aumenta los riesgos de padecer de algunos problemas de salud.

La cefalea tensional se origina por el exceso de tensión muscular. Se caracteriza por ser un dolor en toda la cabeza y que se extiende por el cuello y hombros. La tensión muscular puede ser responsable, incluso, de ocasionar contracturas y nódulos. Los músculos del cuello, de la cabeza e incluso de los ojos se tensan debido a una situación de estrés y en respuesta a eso surge los dolores de cabeza.

La cefalea tensional es un dolor típico de individuos que están expuestos a situaciones de estrés o personas que se preocupan mucho por todo y no consiguen dejar de pensar. Estas personas acumulan tensión a lo largo de día y como resultado aparecen estos dolores de cabeza.

Por tanto, se entiende que la cefalea tensional tiene que ver con una tensión emocional somatizada en ese dolor de cabeza.

Aunque se reduzcan las situaciones que causen estrés al individuo, las cefaleas tensionales presentan resistencia a desaparecer, por eso, una manera de solucionarla es buscar un trabajo multidisciplinar de psicólogos, psiquiatras y fisioterapeutas.

Es importante mencionar que la cefalea tensional no es grave, al contrario de la migraña que le causa al individuo poca o ninguna tolerancia a la luz, sonidos o olores, vómito o náuseas.

Por otra parte, un dolor de cabeza debe recibir más atención cuando es repentino e intenso, cuando causa rigidez en el cuello, cuando es acompañado de fiebre y cuando le causa al individuo desorientación y dificultad para hablar.

Actualmente, la rutina de gran parte de las personas está llena de preocupaciones, obligaciones y, con eso, el estrés surge. Como consecuencia del estrés o incluso de situaciones que generan miedo, preocupación y otros síntomas particulares de cada individuo, la ansiedad aparece. Por eso, es importante tomar medidas que contribuyan a la reducción del estrés y de la ansiedad.

¿Qué debemos hacer para calmar la ansiedad?

• Ejercicios de relajación
• Cambio de hábitos
• Descansar
• Hacer ejercicios físicos
• Distraerse con música
• Reír (la risa alivia el estrés)
• Meditación
• Buscar apoyo psicológico
• Estrategias de gestión del estrés
• Técnicas de relajación

¿Qué debemos hacer para calmar el dolor de cabeza?

• Cerrar los ojos
• Masajear las partes laterales de la cabeza
• Tomar una ducha tibia
• Dormir horas suficientes
• Recibir un masaje (incluyendo las áreas tensionales: cuello y hombros)
• Beber agua
• Aprender estrategias que reduzcan la ansiedad
• Alimentarse con comidas de calidad (que contengan vitaminas)

Recuerda que es imposible evitar el estrés todos los días, pero con algunos cambios de actitud se puede mejorar la manera de lidiar con las adversidades.

Las sensaciones causadas por la ansiedad muchas veces perjudican el día a día, resultando en dificultades para conducir la propia vida. Por eso, es interesante hacer una autoevaluación sobre la necesidad de acudir al psiquiatra para la prescripción de un ansiolítico. Bien como entender y reconocer la importancia de acudir a un psicólogo para con objetivo de mejorar los síntomas y causas de la ansiedad.

A continuación, encontrarás un vídeo para empezar a practicar la relajación.

Este artículo es meramente informativo, en Psicología-Online no tenemos facultad para hacer un diagnóstico ni recomendar un tratamiento. Te invitamos a acudir a un psicólogo para que trate tu caso en particular.

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