Brontofobia: qué es, síntomas, causas y tratamiento

Esta palabra provendría del griego "bronte" que significa "trueno" y "phobos" que significa "miedo". Por tanto, la brontofobia es un miedo irracional a los truenos y a los rayos. En ocasiones, se le conoce como astrafobia, aunque este temor se centra más en el hecho de ser alcanzado por un rayo, mientras que en la brontofobia es en general el miedo a los truenos y relámpagos y sus consecuencias, como un incendio, y no solo al hecho de ser alcanzado directamente por el rayo. Suele ser común durante la infancia pero, en algunos casos, se prolonga hasta la edad adulta. Forma parte de las conocidas como fobias específicas, es decir, se tiene un temor irracional hacia una situación o estímulos concretos. Las fobias específicas son un tipo de trastorno de ansiedad.

Ese miedo comienza cuando se anticipa una tormenta, por ejemplo, al escuchar el pronóstico del tiempo o al ver el cielo nublado y en la persona que padece el miedo empiezan a surgir diversos síntomas físicos, conductuales y psicológicos que acaban afectando al bienestar de la persona. A continuación veremos en concreto todos los síntomas de la brontofobia.

Los síntomas típicos de la brotnofobia se pueden separar en 3 categorías:

• Síntomas físicos/fisiológicos: mareos, aumento del ritmo cardíaco, aumento del ritmo respiratorio, sudoración, problemas gastrointestinales, tensión muscular...
• Síntomas cognitivos: estos se refieren a los pensamientos y emociones. Normalmente son ideas irracionales acerca del peligro de la propia vida debido a una tormenta lo que conlleva a emociones de miedo, ansiedad entre otros.
• Síntomas conductuales: la persona evita los lugares que le causan terror. Por ejemplo, si ve que va a haber tormenta, no saldrá de casa, incluso dejará de ir al trabajo para evitarla. En el caso de los niños, es bastante habitual que se escondan debajo de una cama o de una mesa con el fin de sentirse más seguros.

En algunos casos se puede llegar a desarrollar agorafobia ya que la persona puede dejar de sentirse segura cada vez que sale a la calle por lo que opta por quedarse en casa.

Si presentas los síntomas de brotnofobia anteriormente descritos, es normal que te preguntes "por qué le tengo miedo a las tormentas". La brontofobia es multicausa, es decir, se origina por un conjunto de factores:

• Las causas pueden deberse a haber vivido una experiencia negativa relacionada con una tormenta o escuchar que alguien cercano ha vivido dicho evento. Estas situaciones pueden ser, por ejemplo, accidentes de coche, problemas eléctricos, etc.
• El hecho de que durante la infancia se recibieran constantes mensajes del peligro de las tormentas también puede acabar provocando el desarrollo de este tipo de fobias.
• Asimismo, recibir mensajes de sucesos catastróficos relacionados con alguna tormenta puede hacer que la persona acabe temiendo vivir en un futuro dicha situación.
• Por otro lado, como la mayoría de trastornos psicológicos, es más probable que de dsarrolle en personas con tendencia biológica a la ansiedad.

Las terapias cognitivo-conductual y la terapia de aceptación y compromiso son las que más pueden ayudar a resolver este tipo de problemas.

• Reestructuración cognitiva. Con el fin de resolver los síntomas cognitivos se trabajarían las ideas irracionales relacionadas con el miedo y se implantarían en la mente de la persona nuevos pensamientos mas racionales y acordes con la realidad. Para ello se pueden emplear técnicas como el diálogo socrático.
• Relajación. A nivel físico se entrenarían técnicas de relajación que reduzcan este tipo de síntomas. Al reducir el nivel de activación a la persona le será más fácil analizar la situación de una forma más racional y menos emocional. Al final del artículo encontrarás un vídeo de relajación guiada.
• Exposición en vivo. A nivel conductual, se le expondría de forma paulatina a la persona ante lo que teme. Para ello, en primer lugar se realizaría un listado con los distintos niveles de miedos relacionados con la fobia. Por ejemplo, lo que menos miedo le podría dar relacionado con la fobia es imaginarse una tormenta y lo que más miedo le podría dar es estar en la calle cuando hay tormenta. Se le expondría a la persona primero a la situación que menos causa. Esta exposición durará hasta que la ansiedad desaparezca por completo. Es importante ya que si la persona corta la exposición antes (ya sea de forma literal -irse de la situación- o imaginaria -pensar en otra cosa para distraerse-), la próxima vez que se exponga ante esa misma situación el nivel de ansiedad sería mayor.
• Exposición en imaginación o realidad virtual. Dado que no se puede controlar el clima, otra opción además de la exposición imaginada, es el empleo de la realidad virtual con el fin de que la persona se exponga a su miedo de la forma más real y directa posible. Un problema que tendría la exposición imaginada (imaginarse la situación que se teme) es que depende de la capacidad imaginativa de la persona.

Este artículo es meramente informativo, en Psicología-Online no tenemos facultad para hacer un diagnóstico ni recomendar un tratamiento. Te invitamos a acudir a un psicólogo para que trate tu caso en particular.

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