Cómo afrontar la Navidad sin un ser querido

Uno de los consejos más importantes sobre cómo pasar una Navidad sin un ser querido, es no ocultar tus sentimientos. Cuando te sientas abrumado por emociones intensas y dolorosas, es necesario que te des tiempo, y darte lo que necesitas si, por ejemplo, quieres hablar con alguien.

Esto te podría ser útil para dar el primer paso en el proceso del duelo, aunque a menudo resulta difícil de cumplir. Por el contrario, si sientes el deseo de vivir tu dolor en intimidad, es importante satisfacer tus necesidades más intrínsecas.

Es difícil saber cómo superar la pérdida de un ser querido, a menudo tendemos a no mencionar a las personas que ya no forman parte de nuestras vidas para no perturbar las que quedan, para no arruinar el ambiente o traer tristeza.

Si una persona está de luto, el poder hablar de su ser querido puede ayudarle a expresar sus sentimientos, aunque dolorosos, y le ayuda a mantener vivos sus recuerdos. Pretender actuar como si una persona no haya existido es mucho peor que afrontar la tristeza durante las festividades.

No existe una manera correcta o incorrecta de afrontar lo que se siente: el dolor es algo muy íntimo y cada uno lo vive de manera personal. Por lo tanto, no todos expresan el dolor de la misma manera, y lo mejor que se puede hacer es permitir que todos afronten la pérdida de forma personal. No hay que esperar ciertos comportamientos o que otros expresen el dolor como lo haríamos nosotros.

No podemos saber cómo se siente la persona que sufre en ese momento: no podemos suponer que no tiene ganas de salir, de tener compañía o de celebrar, pero podemos preguntar. Si el luto es reciente, podemos ofrecer ayuda para tareas específicas, como comprar juntos los regalos o decorar la casa.

Si esa persona pasa su primera Navidad sin un ser querido, necesita por lo menos tres tipos de partidarios en la vida:

• El oyente, es decir, el partidario que ofrece un hombro sobre los llantos, una persona que es capaz de manejar los detalles íntimos y la emoción.
• El agente, o la persona que puede ayudar en la práctica cotidiana, como recoger a los niños en la escuela o ayudar con las tareas domésticas cuando la persona que ha sufrido una pérdida lo solicite;
• El distractor, que puede ofrecer momentos más ligeros y puede ayudar a tomar un descanso del duro trabajo del procesamiento del luto.

Una de los consejos sobre cómo pasar la Navidad sin un ser querido es admitir que las emociones del luto tienen una duración diferente para cada persona y a menudo el aspecto exterior. Lo que vemos puede no coincidir con los sentimientos que la persona está experimentando.

Por eso, es importante permanecer junto a la persona de luto, entendiendo que puede haber altibajos y que estos pueden durar mucho tiempo, reiterando que estaremos presentes en todo caso, tanto en los buenos como en los malos, sin juicio o exigencias particulares.

A menudo la ansiedad y la angustia que anticipan la Navidad y otras fiestas podrían ser más intensas que lo que se percibe realmente durante las celebraciones. Hacer planes sobre cómo pasar este tiempo puede ser útil para sentir la situación más bajo control, puede ayudar a distraerse y no dejarse abrumar por la angustia típica cuando se intenta sobrellevar la muerte de un ser querido.

El siguiente consejo sobre cómo afrontar la Navidad sin un ser querido es cambiar de contexto. A veces se puede sentir la necesidad de cambiar de lugar que hasta entonces había sido protagonista de momentos felices y despreocupados. Algunas personas, por ejemplo, se sienten más cómodas cambiando el destino de sus vacaciones.

Si para algunos puede ser de ayuda, para otros, en cambio, es importante compartir de nuevo esa cotidianidad, como expresión de cercanía. Lo que es fundamental es intentar mantener una buena comunicación con las personas cercanas.

Algunas familias podrían encontrar útil crear algo íntimo para vivir el propio dolor y renovar el recuerdo de la persona amada. Un ejemplo de cómo afrontar la Navidad sin un ser querido es recordar a los fallecidos dedicándose al voluntariado, creando espacios en los que es posible devolver al presente la memoria de los que ya no están, compartiendo sus recuerdos y haciéndolo revivir en sus propias palabras.

El último consejo sobre cómo afrontar la Navidad sin un ser querido presta atención a la intensificación de las sensaciones de dolor y pérdida en las festividades, por lo que hay que tener en cuenta las emociones (y a las reacciones a ellas) en este lapso de tiempo.

Fatiga, pérdida del apetito y sensaciones de apatía e impotencia pueden indicar que el dolor experimentado podría desembocar endepresión. Los expertos advierten que esto puede conducir a comportamientos poco saludables, como consumo excesivo de alcohol, alejamiento de las situaciones sociales o autolesiones.

Las primeras fiestas sin un ser querido son difíciles, y aunque nada pueda reemplazar lo que se ha perdido, debemos cuidarnos y dedicar tiempo al recuerdo de esas personas. Además, es importante disfrutar de las tradiciones de las fiestas, ya que esto puede aliviar un poco de sufrimiento, ayudándonos a avanzar en la elaboración del luto.

Si te gustó este post sobre cómo afrontar la Navidad sin un ser querido, te animamos a consultar nuestros artículos acerca de los Tipos de duelo y sus características y Cómo superar un duelo patológico.

Este artículo es meramente informativo, en Psicología-Online no tenemos facultad para hacer un diagnóstico ni recomendar un tratamiento. Te invitamos a acudir a un psicólogo para que trate tu caso en particular.

Si deseas leer más artículos parecidos a Cómo afrontar la Navidad sin un ser querido, te recomendamos que entres en nuestra categoría de Emociones.