Cómo ayudar a una mujer maltratada

Las secuelas pueden ser de diferente índole:

Secuelas psicológicas

• Ansiedad: la violencia repetida e intermitente intercalada con momentos de ternura y cariño crean muchísima ansiedad en la mujer así como respuestas de alerta y tensión continuas.
• Depresión, pérdida de autoestima y sentimientos de culpa: cuando la mujer se encuentra inmersa en el ciclo de la violencia, cree que el comportamiento de la persona que le maltrata es su responsabilidad y depende de su propia forma de comportarse. Esto crea mucha culpabilidad y depresión al ver que constantemente ella intenta estar bien y todo fracasa.
• Aislamiento social: la vergüenza social y los limites que el maltratador le imponte a la mujer crea un aislamiento social bastante fuerte.
• Trastornos psicosomáticos: los malos tratos crónicos provocan en la víctima diferentes trastornos psicosomáticos como la pérdida de cabello, el dolor de cabeza, las alteraciones menstruales... de forma permanente. Es habitual que visiten el médico para hacer consultas de este tipo no hablando de la causa verdadera del problema.
• Trastornos sexuales: si una mujer vive situaciones agresivas en el sexo es normal que acabe creando una aversión a este e incluso termine por desarrollar algún tipo de disfunción sexual.

Secuelas físicas

Rupturas, hematomas... Todo tipo de lesiones derivadas del maltrato y en especial aquellas relacionadas con los trastornos ginecológicos.

Secuelas sexuales

Trastornos sexuales: diversos estudios apuntan que la mayoría de mujeres maltratadas tienen problemas en su vida sexual e incluso algunas no quieren volver a tener relaciones sexuales. Además, cuando se producen agresiones en la vida sexual dentro del matrimonio, se pueden llegar a originar disfunciones sexuales como la anorgasmia o el vaginismo (contracción de los músculos que impide la penetración).

Secuelas económicas

La mayoría de mujeres que sufren maltrato después se ven obligadas a vivir con sus familias o de alquiler, recomponer su vida en cuanto al entorno económico y emancipatorio, es al principio muy difícil. La pérdida de la vida laboral también influye en lo económico.

Secuelas sociales

El mismo maltrato puede generar efectos de vergüenza en la víctima así como el propio maltratador puede buscar alejarla de su grupo social. Normalmente, cuando rompen con la situación, las mujeres maltratadas suelen encontrar apoyo en su grupo más cercano que es la familia o amigos de confianza.

La vida laboral también se ve influenciada, pues la mayoría de mujeres terminan por dejar sus trabajos porque el marido les obliga o por diferentes cuestiones.

Es mucho y muy importante lo que puede hacer el entorno de la víctima para ayudar a la mujer a superar la situación de maltrato psicológico y paliar los posibles efectos futuros. El aislamiento es un grave factor de riesgo para la mujer maltratada, el agresor intentará aislarla y separarla de su familia y amistades para aumentar su dependencia hacia él. Hay que evitar lo máximo posible que esto ocurra.

¿Cómo ayudar a una amiga que sufre de violencia de género? Sigue las siguientes indicaciones:

1. Arroparla.
2. Llamarla por teléfono.
3. Atenderla.
4. Estar muy presentes.
5. Crear una "red" de amistades y familia cercana, turnándose para estar en contacto permanente.
6. No enfadarse u ofenderse si ella muestra fastidio por las llamadas. Que la próxima llamada la haga otra persona de la red.
7. No permitir que el agresor logre aislarla aumentando la vulnerabilidad de la mujer, favoreciendo las situaciones de dominio y sometimiento.

Recordad que las amenazas de muerte, las coacciones, y en general, la violencia psicológica está penada por ley y por lo tanto, familiares, amigos o vecinos que conozcan esta situación pueden denunciar a la policía si lo creen pertinente. Algo que va muy bien para saber cómo actuar, si denunciar o no, es preguntarse: ¿Cree que está bien denunciar el hecho si el autor fuera una persona desconocida? Si la respuesta es sí, denuncie.

Que la persona que comete la violencia sea conocida es un agravante para la indefensión de la víctima, no un atenuante para su impunidad. Si la que le llama solicitando ayuda es la víctima, procederemos de la siguiente manera:

1. Pregúntele dónde se encuentra ella.
2. Mantenga la calma y, mientras usted permanece al teléfono con ella, que otra persona de confianza se acerque a buscarla.
3. Llame al servicio de emergencias y no la deje sola.

La forma de ayudar a una mujer maltratada físicamente es parecida a la forma de ayudar a una mujer maltratada psicológicamente (normalmente, ocurren ambas cosas a la vez), pero teniendo en cuenta que puede tener lesiones que necesiten de atención hospitalaria y que su vida corre especial riesgo.

Si el daño es grave y le solicita ayuda o simplemente usted lo ve, es importante llevarla a urgencias, que la atiendan y reconozcan y que los médicos hagan su trabajo de forma pertinente para ayudarla. Por otra parte, si usted mismo/a identifica señales físicas de maltrato como hematomas o roturas, siga los siguientes pasos:

1. Trate de hablar con alguien cercano de su grupo de amistades o red de apoyo que pueda corroborar o desmentir lo que usted está observando.
2. Acuda a los Servicios de Asistencia necesarios y especializados en tratar la violencia de género para recibir la información necesaria y saber cómo ayudarla de forma concreta.

En primer lugar, debemos identificar a la mujer maltratada. Estos son diez consejos de la mano de la doctora Conde para identificar cuándo estamos delante de un caso de maltrato:

• No suelen expresar sus necesidades, cediendo siempre a lo que la pareja pide.
• Se muestran sumisas con su pareja cuando las observamos y cambian su forma de actuar cuando la pareja está delante a cuando están a solas.
• No toman decisiones si no tienen el consentimiento de su pareja.
• Muestran algún tipo de excusa: "me he caído", "soy muy despistada", "me he dado con la puerta" si descubres un moratón o lesión. Intentan cambiar de tema y esta situación se da a menudo.
• Presentan síntomas depresivos, ansiosos y físicos debido al estrés que viven de forma diaria.
• Tienen una red social escasa de interacciones. Deja de participar en actividades sociales.
• Justifica a su pareja si le hablamos de su comportamiento.
• Puede presentar problemas de sueño, cambiar patrones de alimentación, subiendo o bajando de peso.
• Se puede haber alejado del núcleo familiar.
• Puede haber cambiado su forma de vestir o no interaccionar con hombres, sobre todo si su pareja está delante.

En segundo lugar, debemos conocer cómo es el ciclo de esta violencia para entender por qué algunas mujeres maltratadas no quieren denunciar o les cuesta mucho salir de la situación.

El ciclo de la violencia

Cuando muchas campañas publicitarias incitan y hacen hincapié a la mujer para que denuncie se olvidan de algo muy importante: no es fácil salir de una situación de maltrato de por sí y menos en municipios pequeños, zonas rurales o sitios donde los prejuicios son fuertes, los valores familiares chocan con lo que ocurre y romper el proceso de maltrato se vuelve aún más difícil.

Hay que tener esto en cuenta para ayudar a la mujer de la forma adecuada y conocer cómo es el ciclo de la violencia:

1. Estallido de la violencia: la víctima cree que podrá controlar la violencia ya que suele ser de menor frecuencia y gravedad, adoptando a menudo, la forma de abuso emocional: descalificaciones, humillaciones... La mujer intentará acomodarse al agresor para no ser agredida y permanecer pendiente de sus gestos, de lo que le irrita.. olvidándose así, de sí misma. Suele ser en este periodo cuando la mujer empieza a aislarse, a menudo para evitar discusiones.
2. Luna de miel: la mayoría de agresores combina las conductas agresivas con periodos amorosos y complacientes que buscan convencer a la víctima de que no se van a volver a dar esas situaciones violentas. Se conoce como Luna de miel dentro del ciclo de violencia. Se denomina a esto como doble fachada ya que hace creer a la víctima que es un hombre verdaderamente enamorado, en el fondo.
3. Acumulación de tensión y de nuevo, vuelve a empezar: en la fase más avanzada del maltrato, el agresor amenaza a la víctima con actos violentos muy graves si esta se atreve a abandonarlo. Aquí pueden verse inmersos los hijos, si es que existen, la amenaza del suicidio del propio agresor que buscará culpabilizarla...

Entonces, cómo ayudarla sino quiere denunciar

Una vez conocemos el ciclo de la violencia y podemos entender qué ocurre en una situación de maltrato y por qué es difícil denunciar y salir de ella nos preguntamos, ¿qué podemos hacer nosotros? En primer lugar es importante escucharla, mantenerse en su círculo de apoyo, no dejarla sola. Hay que involucrarse, hablar con más personas de su alrededor para comprobar si ellos también han visto lo mismo.

Lo ideal es que pidan ayuda en un centro especializado sobre su caso concreto para que les informen de cómo actuar, qué hacer... no debéis mostraros agresivos con la mujer ni incitarles de forma bruta en que denuncien, ellas necesitan entender lo que ocurre y no todas se dan cuenta en un inicio. Lo mejor es hacerles ver que:

• Los insultos y descalificaciones son malos tratos.
• Los celos no son amor.
• El control no es amor.
• El maltrato y los golpes no son formas corrientes de resolver los problemas en una pareja.

Si por ella misma no decide denunciar y la situación es complicada, debéis tomar las medidas aconsejables por expertos que consultéis para denunciar vosotros de forma que no se ponga en peligro la vida de la mujer maltratada.

Es un problema delicado que no puede hacerse de cualquier manera pues en muchos casos, ella y los hijos (si los hay) corren un grave peligro. Es importante que no esperéis a ver marcas en su cuerpo, ni que usted mismo crea que está exagerando. Probablemente se está dando cuenta del inicio de algo que puede volverse mucho más grave.

Diálogo, buena comunicación y no abandonarla. De nuevo, hacerle ver que el control, los celos y el maltrato no son amor. Es importante dialogar con la mujer sin mostrarse agresivo, hacerle ver que lo que está viviendo no es normal y sobre todo que usted está a su lado para ayudarle a salir de esta situación. Si por fin, ella decide contarla o se da cuenta de lo que ocurre:

1. Pregúntele cómo cree ella que usted puede ayudarla.
2. Asegúrese de saber si hay alguien más que conozca la situación.
3. Tome contacto con esta/s persona/s e intercambie sus pareceres.
4. Logre que esa/s persona/s formen parte de la “trama” en la red de contención y apoyo.
5. Explíqueles lo que usted conoce acerca del tema y sus riesgos, ofrézcales material explicativo y la posibilidad de consultar con algún servicio especializado cercano a su domicilio si lo necesitaran.
6. Trate de unificar criterios y posiciones respecto a lo que sucedió o está sucediendo y cómo actuar.

Empezar una relación con una mujer maltratada es difícil y requiere de mucha paciencia y empatía. Muchas de ellas se sienten desconfiadas y reticentes sobre todo a las cuestiones sexuales. A menudo, en la violencia de género, el sexo es para ellas sufrimiento y se sienten coacciones e utilizadas para lograr los fines del maltratador. El shock puede ser tan grande para ellas que olviden completamente el motivo de amor por el que dos personas pueden mantener relaciones sexuales y lo contemplen como una expresión de dominio, poder, chantaje...

¿Es posible romper ese bloqueo? ¿Es posible que una mujer maltratada vuelva a confiar en un hombre? Como hemos dicho anteriormente, se requiere paciencia y años pues lo primero que debe reconstruirse es la identidad de la mujer, sin ella, difícilmente podrá iniciar una relación sana.

Hay que trabajar en la autoestima de la mujer, en su capacidad de decisión, en definitiva, en su seguridad. El tiempo que puede tardar este proceso es relativo y dependerá de cada mujer y cada circunstancia. Lo mejor que puede hacer alguien durante este proceso es no forzarla a nada y simplemente mantenerse a su lado y ser su apoyo mientras ella se reconstruye.

Las carreras universitarias que puedes desarrollar para trabajar posteriormente con mujeres que han sufrido violencia de género son las siguientes (dependerá la que elijas según la perspectiva desde la que quieras trabajar con ellas):

• Psicología.
• Criminología.
• Trabajo Social.
• Derecho.
• Medicina.

También hay algunos másteres y ciclos con los que puedes introducirte en el tema de la violencia de género para lograr ser un buen profesional.

Este artículo es meramente informativo, en Psicología-Online no tenemos facultad para hacer un diagnóstico ni recomendar un tratamiento. Te invitamos a acudir a un psicólogo para que trate tu caso en particular.

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