El trastorno límite de la personalidad (TLP) es un trastorno mental que se caracteriza por la incapacidad de la persona para manejar emociones de forma eficaz. El trastorno suele comenzar en la adolescencia o la adultez temprana y se manifiesta principalmente en el contexto de las relaciones, pudiendo verse afectadas sólo algunas o todas las relaciones de la persona, en función de cada caso. Una persona diagnosticada de trastorno límite de la personalidad puede presentar un buen funcionamiento en determinadas áreas de su vida, mientras su área privada puede encontrarse muy alterada. En este artículo de Psicología-Online te mostramos algunos consejos sobre cómo tratar a una persona con trastorno límite de la personalidad.
Consejos para tratar a una persona con trastorno límite de la personalidad
Para identificar a una persona con este trastorno puedes utilizar el test de trastorno límite de la personalidad. Para poder saber cómo tratar a una persona con trastorno límite de la personalidad es esencial que conozcas bien la enfermedad. Y es que puede resultar difícil comprender sus sentimientos o comportamientos y, por tanto, saber cómo tratarlo. Teniendo en cuenta esto, hay una serie de cosas que puedes hacer para apoyarles:
- Intenta ser paciente: si la persona con trastorno límite de la personalidad se encuentra en un momento en el que tiene dificultades para manejar sus emociones, intenta no involucrarte en una discusión provocada por la agitación del momento. Puede ser mejor esperar hasta que los dos estéis más tranquilos y así poder hablar de forma más calmada.
- No juzgarle: trata de escucharle sin decirle que sus reacciones son inapropiadas, exageradas o sin sugerirle que no debería sentirse cómo lo hace. Entiendas o no cómo se siente, no importa, se siente así y es importante reconocerlo, y sobre todo, que la persona perciba ese reconocimiento.
- Mantén la calma y sé congruente: si la persona con trastorno límite está experimentando una serie de emociones abrumadoras, ser un apoyo en esos momentos puede ayudarle a sentirse mejor y tener una mayor seguridad.
- Ayúdale a recordar sus aspectos positivos: cuando alguien a quién quieres está pasando por un mal momento y le cuesta recordar las cosas buenas de sí mismo, quizás le sirva de ayuda que tú le recuerdes sus aspectos positivos.
- Trata de establecer límites y expectativas claras: es muy importante dejar los límites claros, ya que suelen mostrar excesiva preocupación, sentirse rechazados o abandonados, aunque no haya motivos. Y unos límites difusos pueden incrementar esos sentimientos.
- Plan a seguir: cuando la persona con trastorno límite se encuentre en un momento más estable, pregúntale sobre lo que le gustaría que hicieras cuando esté mal. De esa forma, podéis crear de forma conjunta un plan a seguir.
- Observa e identifica sus desencadenantes: habla con la persona diagnosticada de trastorno límite de personalidad con el objetivo de observar e identificar qué tipos de situaciones o de conversaciones desencadenan emociones o pensamientos negativos.
- Aprender más aspectos del trastorno límite de la personalidad y ayuda a acabar con el estigma: el trastorno límite de la personalidad es un diagnóstico complicado y la persona con este diagnóstico tiene que luchar a veces con discriminación por parte de otra gente. Por eso, es fundamental aumentar el conocimiento sobre este trastorno para romper poco a poco el estigma que existe por parte de la sociedad. En Psicología-Online descubrirás las causas, síntomas y tratamiento del TLP.
- Cuídate a ti mismo: cuidar de una persona con este trastorno puede resultar muy difícil y estresante. Tu salud mental es muy importante. De ahí que trates de adoptar estrategias de afrontamiento adecuadas, técnicas para manejar el estrés y mantener tu bienestar.
¿Cómo puedo ayudarme si tengo TLP?
En el caso de que seas tú la persona que padece TLP es importante que, también, sepas cómo actuar. Además de seguir el tratamiento hay una serie de cosas que puedes hacer para ayudarte. Debes tener en cuenta que diferentes estrategias funcionan en personas distintas en diferentes momentos. Por eso es importante que después de probar diversas alternativas, construyas tu propio plan:
Habla con alguien
Cuando no te encuentras bien es muy duro afrontar los problemas, pero hablar con alguien puede ayudarte a superar esos momentos difíciles. Si no tienes alguien en tu entorno con quien hablar puedes acudir a grupos de autoayuda en los que encontrarás el apoyo de personas que han pasado por lo mismo que tú.
Registra tu estado de ánimo en un diario
Escribir cómo te sientes en un diario puede ayudarte a identificar los primeros signos o desencadenantes de tus emociones o pensamientos negativos. Además de esto, también puede ser interesante escribir aquello en lo que te va bien. Solemos centrarnos en los factores de riesgo y perdemos de vista los factores de protección, que son fundamentales para construir la vida de la persona.
Establece un plan para cuando las cosas vayan mal
Si no te sientes bien es muy difícil que puedas describir a la gente de tu entorno la ayuda que necesitas. Por eso es fundamental que cuando te encuentres mejor establezcas un plan a seguir para cuando te encuentres mal. Sería el plan para un momento de crisis y puede contener posibles desencadenantes, estrategias de autoayuda o recursos de apoyo.
Crea un baúl de autocuidado
Junta en una caja o baúl todas aquellas cosas que podrían ayudarte en momentos duros. Se trata de una especie de kit de autoayuda para tu salud mental que puede contener libros, películas o música favoritas, frases motivacionales, fotos que te reconforten, una vela, etc.
Con estos consejos podrás aprender a tratar a una persona con trastorno límite de la personalidad, es decir, contigo mismo.
Cuida tu salud física
Cuidar tu salud física puede ayudarte a cambiar tu estado de ánimo. Por ejemplo:
- Intenta cuidar tu dieta: mantener una dieta adecuada. Comer de forma regular y mantener estables los niveles de azúcar en sangre puede marcar una diferencia en el estado de ánimo y en sus niveles de energía.
- Intenta hacer algo de actividad física: el ejercicio físico puede funcionar cómo un antidepresivo natural. Trata de establecer una rutina de ejercicio físico, así mejorará tu bienestar mental.
- Pasa tiempo al aire libre: realizar actividades al aire libre, en espacios verdes puede aumentar tu bienestar.
- Evita las drogas y el alcohol: en momentos difíciles la persona puede encontrar una salida en el uso de drogas o alcohol, pero a la larga puede hacer que te sientas mucho peor y evites afrontar problemas subyacentes que el consumo de drogas ha enmascarado.
- Intenta dormir lo suficiente: tener una buena calidad del sueño puede ayudarte a mantener unos mejores niveles de energía para afrontar los momentos difíciles.
Este artículo es meramente informativo, en Psicología-Online no tenemos facultad para hacer un diagnóstico ni recomendar un tratamiento. Te invitamos a acudir a un psicólogo para que trate tu caso en particular.
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