Cómo tratar a una persona con trastorno paranoide de la personalidad

El trastorno paranoide de la personalidad es una alteración de la personalidad en la cual el individuo que la padece tiene un patrón de suspicacia y desconfianza hacia los demás, sin importar que tan cercana sea su relación con el otro.

Los síntomas de este tipo de trastorno suelen identificarse durante la adultez, sin embargo, en algunos individuos se pueden identificar antes. La constante desconfianza que tienen hacia los demás y el preocuparse frecuentemente de que les pueden hacer daño y que pueden ser engañados y/o traicionados por el otro, provoca que estas personas permanezcan en estado de alerta todo el tiempo y con un alto grado de ansiedad.

Es por todas estas razones que con el tiempo se convierten en personas que pueden ser consideradas como frías y que huyen del contacto con los demás, prefieren también atacar primero que ser atacados. Viven frustrados y suelen tener muy mal carácter, por lo que generalmente no tratan bien a las personas que tienen a su alrededor.

Las personas que padecen este trastorno tienen una serie de características en común, por lo que si lo que pretendemos es ayudar o saber cómo tratar a una persona con trastorno paranoide de la personalidad, es necesario estar informado. Algunas de las características principales de este tipo de padecimiento son las siguientes:

• Creencia de que todo lo que hagan los demás será hecho en su contra.
• Incapaces de confiar plenamente en alguien, por lo que dudan constantemente de la lealtad de las personas cercanas.
• Suelen ser bastante rencorosas.
• Tienden a estar todo el tiempo en estado de alerta, por lo que en muy pocas ocasiones se encuentran relajadas.
• En ocasiones, suelen ser bastante agresivas.
• Si tienen pareja, sospechan de que les traiciona sin tener una justificación real.
• Se sienten ofendidos y atacados con facilidad.
• Suelen tener mal carácter.
• Se comportan de manera distante y fría con los demás.

Antes de mencionar cuál es el tratamiento que se aplica a las personas que presentan este tipo de trastorno, es importante mencionar que es muy complicado que una persona con este padecimiento quiera acudir a consulta o pedir ayuda. Pero, ¿por qué les es tan difícil pedir ayuda? Simplemente, porque por su propia paranoia, se le hace casi imposible incluso confiar en el personal sanitario. A continuación, vamos a mencionar brevemente en qué consiste el tratamiento para este tipo de trastorno.

Psicoterapia

El objetivo de la psicoterapia es eliminar en la medida de lo posible los síntomas asociados al trastorno paranoide de la personalidad. Para ello, el paciente debe de estar sumamente involucrado y decidido a mejorar porque, de lo contrario, la intervención estaría destinada al fracaso.

Algunas de las técnicas con las que normalmente se trabaja en la psicoterapia son, por ejemplo, la reestructuración cognitiva, con la que se modifican sus pensamientos negativos e inadecuados y que lo llevan a mantener ciertas conductas como la evitación, la agresión, etc., y se sustituyen por unos más objetivos y más asertivos.

Se entrena también a la persona en habilidades sociales con la finalidad de mejorar la relación con los demás, así como también se mejora la percepción que tiene hacia las personas. Por otro lado, también se le enseña a realizar ejercicios de relajación que tiene que ir llevando a cabo de manera constante en su vida cotidiana para que se vaya a acostumbrando a encontrarse menos tenso y deje de estar todo el tiempo en estado de alerta. Cabe mencionar que dependiendo de la situación individual, algunas personas requieren también de llevar a la par un tratamiento farmacológico.

Como ya hemos mencionado anteriormente y, sobre todo, si ahora mismo convivimos con una persona paranoide, tenemos muy claro que es muy difícil tratar con ella, incluso puede que en determinado momento, uno mismo se pueda estar sintiendo peor que quien padece este trastorno. Sin embargo, en caso de que tengamos que tratar con ella constantemente porque sea una persona importante para nosotros o con la que nos vemos obligados a lidiar mucho tiempo, existen una serie de recomendaciones que podemos seguir para ayudarnos a nosotros mismos y tratar también de ayudarla en lo posible. Algunas de estas recomendaciones que nos ayudarán a saber cómo tratar y convivir con una persona con trastorno paranoide de la personalidad, son las siguientes:

1. Motiva a esa persona a asistir a un profesional, ya sea con un médico, psicólogo y/o psiquiatra. Es recomendable que no se lo digas directamente y que vayas poco a poco tanteando el terreno, primero, para darte cuenta de que tan consciente está de que necesita ayuda, después qué tan dispuesto está para hacer algo para estar mejor, también prestar atención a qué tipo de profesional le tiene menos desconfianza, etc. Toma en cuenta que, en muchas ocasiones, puede estar quejándose de algún otro malestar que sea consecuencia indirecta del trastorno y que eso sea lo que puede motivarlo a buscar ayuda y no precisamente porque detecte que tiene este tipo de padecimiento, así que esto lo puedes aprovechar.
2. Recuerda que esta persona tiene una enfermedad. En muchas ocasiones, entramos en el mismo juego y reaccionamos ante las provocaciones que nos puede estar haciendo la otra persona, sin embargo, es importante recordar en todo momento que esta persona está enferma y esa es la razón por la cual actúa así.
3. No respondas a sus agresiones, mejor evítalo(a). Cada vez que esa persona se esté comportando de manera hostil y agresiva con nosotros, lo mejor que podemos hacer es evitarla, antes que enfrentarla o tratar de calmarla. Simplemente, irnos del lugar en donde se encuentra y después de pasado un tiempo, cuando ya se haya tranquilizado, volver a tener contacto con ella.
4. Trata en la medida de lo posible de ser empático(a). Esto quiere decir que es aconsejable que escuches a esa persona y te intereses por ella, por ejemplo, puedes preguntarle cómo se siente, ser amable, etc. Sin embargo, nunca debemos permitir que esa persona diga o haga cosas que nos dañen.
5. Mantén la calma. Aunque pueda sonar complicado, es necesario aprender a mantenernos lo más tranquilos posibles, sobre todo, cuando tenemos que estar lidiando constantemente con esta persona. Para ello, es aconsejable entrenarnos en ejercicios de relajación, de meditación y todo lo que nos ayude a sentirnos más tranquilos y en paz con nosotros mismos.
6. Toma distancia. Si se trata de una persona, como puede ser un compañero(a) de trabajo, un vecino, un familiar lejano o, simplemente,que no sea tan importante para nosotros, lo mejor que podemos hacer es tomar distancia de esta persona. Si se trata de alguien a quien te veas obligado a ver todos los días aunque sea por un momento y no puedas evadirlo tanto, una buena opción es recordar que tiene una enfermedad, seguir realizando lo estás haciendo y evitar salir afectado.

Este artículo es meramente informativo, en Psicología-Online no tenemos facultad para hacer un diagnóstico ni recomendar un tratamiento. Te invitamos a acudir a un psicólogo para que trate tu caso en particular.

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