El Simbolismo y Características del pensamiento pre-operatorio
El período de la vida que abarca desde los 2 años y medio a los 6 años no es un todo homogéneo, porque, a su vez, cabe subdividirlo en dos subetapas: una que termina al final del cuarto año y otra que incluye los 5-6 años. Se denomina así -preoperatorio- porque Piaget consideraba que este período es la preparación y antesala del período de las operaciones mentales.
En torno a los dos años y medio el niño, sin abandonar el mundo de la acción, accede al mundo de los símbolos, de la representación, de la referencia. Llamamos función simbólica o semiótica a la reunión de las diferentes formas de símbolos.
Las raíces afectivo-cognitivas del simbolismo
El estudio de la actividad simbólica permite integrar las ideas de Freud y Piaget. El primero aporta el componente motivacional y el segundo el cognitivo.
Nuestra especie aportó una novedad sin precedentes desde el punto de vista evolutivo: la energía de la pulsión sexual llegó a ser independiente de su propósito biológico inmediato, quedando disponible para ser invertida en una re-presentación simbólica de relaciones sociales satisfactorias.
Hemos de agrupar los significantes en dos grandes grupos:
- los que son privados, no arbitrarios, es decir, que guardan alguna relación con el significado al que se refieren. Por ejemplo, los símbolos oníricos, las imágenes internas
- los que son de origen social y de carácter arbitrario. Por ejemplo, los signos del lenguaje natural o del lenguaje de señas en el caso de los sordomudos.
Los primeros significantes en aparecer son, precisamente, los símbolos privados, de carácter no verbal. Esto quiere decir que es la función simbólica la que hace posible la adquisición de símbolos, primero, y signos lingüísticos, después.
Características del pensamiento pre - operatorio
Uno de los rasgos más llamativos del pensamiento preoperatorio es el egocentrismo. Piaget denomina egocentrismo a la dificultad del infante para contemplar su propio punto de vista como uno más entre los posibles. Del mismo modo tampoco puede pensar acerca de su propio pensamiento.
El niño considera que las cosas son lo que aparentan ser en la percepción inmediata, egocéntrica. Es lo que se conoce como realismo. Piaget e Inhelder señalan que el realismo se debe a la indiferenciación de lo psíquico y lo físico. El razonamiento preoperatorio produce o se sirve de preconceptos, es de tipo transductivo y sincrético.
El razonamiento no va de lo general a lo particular (deducción) ni de lo particular a lo general (inducción). Pasa de lo particular a lo particular (transductivo). Opera mediante la mera yuxtaposición de partes sin lograr una auténtica articulación entre ellas (sincrético). Todas estas limitaciones hacen que los niños, por ejemplo, atribuyan a objetos y hechos físicos las propiedades de las entidades biológico - psicológicas.
Es lo que se conoce con el nombre de animismo. Igualmente, consideran a los fenómenos físicos como productos de la creación humana. Se denomina artificialismo a esa conducta cognitiva. > Siguiente: El lenguaje natural y la neurofisiología de la función simbólica
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