Fenómenos psicológicos sociales sorprendentes

La difusión de la responsabilidad es un fenómeno sociopsicológico que expone que una persona tiene menos probabilidades de asumir la responsabilidad de una acción cuando hay otros individuos presentes. En estas situaciones, el individuo asume que los demás son los responsables de actuar.

Este es uno de los fenómenos psicológicos sociales que tiende a presentarse en grupos de personas numerosos en los que la responsabilidad no se asigna de forma específica. La difusión de las responsabilidades raramente ocurre cuando la persona está sola, sino que sucede en grupos de tres o más personas.

A continuación, te mostramos algunos ejemplos de este fenómeno psicológico:

• Situaciones de emergencia: las personas sienten menos la responsabilidad de responder o pedir ayuda si saben que hay otros que también están observando la situación.
• Tareas en grupo: cada miembro asume la menor responsabilidad por contribuir y trabajar para lograr la tarea o el objetivo. La extensión de la responsabilidad está presente en casi todos los grupos, pero a varios niveles, y puede mitigarse reduciendo el tamaño del grupos y aumentando explícitamente la responsabilidad de cada uno.

¿Qué fenómenos estudia la psicología social? Un de ellos es el efecto arrastre, o efecto bandwagon, en el cual se considera que una persona tiene ciertas creencias solo porque la mayoría cree en esas mismas cosas. A menudo, se suele hace referencia a este efecto llamándolo instinto del rebaño.

Por lo tanto, se puede decir que los humanos tenemos la tendencia de seguir a la multitud. En el sentido literal, el término bandwagon significa "el carro que lleva a la banda a un desfile". Por lo tanto, la expresión "jump on the bandwagon" se utiliza en el sentido de "unirse a una tendencia cada vez más extendida".

Si quieres entender mejor este fenómeno psicológico, te recomendamos leer este artículo sobre el experimento de Asch: influencia de la mayoría y la conformidad.

El efecto Dunning-Kruger es una distorsión cognitiva en la que una persona poco experimentada y competente en un campo tienden a sobreestimar sus habilidades y a despreciar a los expertos en la materia. Como corolario de esta teoría, los incompetentes a menudo se muestran extremadamente arrogantes.

El efecto Forer, también llamado efecto de validación subjetiva o efecto Barnum, es uno de los fenómenos psicologicos sociales más sorprendentes. Concretamente, describe cómo una persona identifica como propio un fenómeno genérico sin darse cuenta de que puede hacer referencia a cualquier individuo.

Así pues, el efecto Forer proporciona una explicación parcial de la gran difusión de algunas pseudociencias como la astrología y la adivinación, así como de algunas pruebas de personalidad.

El efecto farola o street light effect, es un tipo de distorsión observacional que consiste en buscar algo donde es más fácil encontrarlo. Este tipo de investigación también se denomina "búsqueda del borracho", debido al ejemplo que se usa comúnmente para explicar este fenómeno.

La expresión fue acuñada por David H. Freedman, pero la metáfora se remonta por lo menos a 1964, cuando Abraham Kaplan lo bautizó como el "principio de la búsqueda del borracho". Si hablamos ejemplos de fenómenos psicológicos, este tiene numerosas versiones, pero todas tienen la siguiente estructura:

• Un policía ve a un borracho que busca algo cerca de una farola y le pregunta qué ha perdido.
• "Un juego de llaves", responde el interpelado.
• El policía decide ayudarlo, pero después de unos minutos de búsqueda infructuosa le pregunta al borracho si está seguro de haber perdido las llaves cerca de la farola.
• El borracho responde que no y que en realidad las perdió en el parque.
• Entonces, el policía le pregunta "¿Por qué las buscas aquí entonces?"
• El borracho responde: "¡Porque aquí está iluminado!".

En realidad, la historia del efecto farola está relacionada con la tendencia humana a conducir la búsqueda de la verdad por caminos simples, evitando la complejidad. Por ejemplo, es difícil encontrar un objeto donde está oscuro, así que se suele buscar lugares donde hay luz porque la búsqueda será más fácil.

Hay muchos fenómenos psicológicos sociales que afectan a la conducta humana. Concretamente, el efecto Lombard es la tendencia involuntaria de los hablantes a aumentar la intensidad de la voz en presencia de un ruido de fondo que interfiere con la comprensión de la conversación.

El esfuerzo y el cambio no solo afectan a la intensidad, sino también a otras características acústicas como la altura, el ritmo y la duración silábica. Esta compensación tiene como resultado que el oyente percibe un aumento en del sonido y, por lo tanto, comprende mejor las palabras.

Como vemos, el efecto Lombard está relacionado con las necesidades reales de comunicación. Dado que este efecto es involuntario, se utiliza para detectar tinciones en la simulación de la pérdida de audición.

El efecto Pigmalión, también conocido como efecto Rosenthal, deriva de los estudios clásicos sobre la profecía autorrealizada, cuyo supuestos básicos siguen este orden:

1. Si un maestro cree que un niño o niña tiene menos recursos intelectuales, inconscientemente lo tratarán de forma diferente a los demás.
2. Entonces, el menor interiorizará ese juicio y se comportará en consecuencia.
3. De esta forma, se instaurará un círculo vicioso por el cual el infante tenderá a actuar tal como el maestro había imaginado en un principio.
4. Hay que precisar que este comportamiento puede atribuirse al hecho de que, inconscientemente, el juicio negativo del profesor menoscabará los resultados académicos del menor, pues creerá que no es capaz tener el rendimiento de los demás.

En definitiva, este fenómeno psíquico expone que pertenecer a un contexto social en el que se evalúa en función del rendimiento puede tener afectar psicológicamente a los niños y niñas cuyos resultados no se asemejen a la media. Además, el hecho de que el propio profesor dé más crédito al alumno facilita su aprendizaje. Por el contario, si el maestro lo desacredita, el infante puede llegar a creer que no es capaz de cumplir con los objetivos académicos.

El efecto Ringelmann es la tendencia de los miembros de un grupo a volverse cada vez menos productivos cuando el grupo crece. Este efecto, descubierto por el ingeniero agrícola francés Maximilien Ringelmann, ilustra la relación inversa que existe entre el tamaño de un grupo y la amplitud de la contribución individual de sus miembros en la realización de tareas.

Así pues, Ringelmann estudió la relación entre las reducciones en la eficacia o eficiencia del rendimiento y la productividad del grupo al trabajar conjuntamente en una tarea. El resultado de este fenómeno psicológico social es que el esfuerzo es significativamente menor que cuando los miembros trabajan en grupo que cuando trabajan solos.

Además, Ringelmann descubrió que a medida que más personas se suman a un grupo, este se vuelve cada vez menos eficiente. En última instancia, esto vulnera la noción de que el esfuerzo del grupo y la participación del equipo conducen de manera fiable a un mayor esfuerzo en favor de los miembros.

El efecto espectador, también conocido como apatía del espectador o efecto testigo. es un fenómeno de la psicología social que expone que las personas no ofrecen su ayuda a alguien en problemas cuando hay otras personas presentes.

La probabilidad de intervención está inversamente relacionada con el número de espectadores. En otras palabras, cuanto mayor sea el número de espectadores, menor será la probabilidad de que alguno de ellos preste ayuda. Numerosas variables intervienen en la determinación del efecto espectador como, por ejemplo, la ambigüedad, la cohesión social y la extensión de la responsabilidad.

En psicología social, el error fundamental de atribución es la tendencia a atribuir como propia la causa de un comportamiento, subestimando la influencia del entorno o el contexto. Este efecto también se describe como la tendencia a creer que lo que las personas hacen refleja lo que son.

El ejemplo clásico que se expone para entender este fenómeno psicológico social es el siguiente:

Un conductor está atrapado en el tráfico debido a otro conductor.

• El primero atribuye el comportamiento del otro a su personalidad, por ejemplo, al hecho de que solo piensa en sí mismo, que es egoísta o que es un conductor inexperto. Aun así, esto no quita que su comportamiento también está influenciado por factores externos como, por ejemplo, que está a punto de perder su vuelo, su esposa está dando a luz en el hospital o que ha tenido un día horrible.
• El otro conductor comete el mismo error y se disculpa diciendo que le han afectado causas contingentes, por ejemplo, que llega tarde a su entrevista de trabajo, que debe recoger a su hijo para llevarlo al dentista o que cree que no es buen conductor.

Este artículo es meramente informativo, en Psicología-Online no tenemos facultad para hacer un diagnóstico ni recomendar un tratamiento. Te invitamos a acudir a un psicólogo para que trate tu caso en particular.

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