¿Hablar inglés te da ansiedad?

La comunicación oral se caracteriza por ser espontánea. No es lo mismo hablar acerca de un tema que escribir al respecto. Por lo tanto, si cada vez que quieres decir algo, te reprimes y comienzas a pensar en si la construcción de la frase es la correcta o si podrías conjugar la oración de una mejor manera, te estás limitando. Intenta no analizar cada cosa que sale de tu boca, o por lo menos no lo hagas de antemano. Si la persona con la que estás hablando está en grado de corregirte, pídele que lo haga y de esa manera podrás aprender mientras practicas sin perder la espontaneidad.

Muchas veces nos quejamos de que algo no nos sale como nos gustaría. En esos casos es necesario confrontar nuestras expectativas con el tiempo que dedicamos a la actividad. Si mi objetivo es lograr un dominio del idioma a nivel bilingüe, indefectiblemente tendré que dedicarle tiempo y esfuerzo. Actualmente, existen muchas alternativas a la hora de estudiar. A partir de la posibilidad de poder estudiar en forma virtual a través de internet, las limitaciones de horarios y distancias ya no son una excusa. Si decides tomar clases de inglés en línea, por ejemplo, en plataformas como Preply, tendrás la posibilidad de estudiar a tu ritmo siguiendo un programa desarrollado según tus necesidades. En cambio, si no estás dispuesto a dedicarle tiempo de estudio, entonces lo mejor es relajarse y no pretender la excelencia.

Estudiar es fundamental, pero luego es necesario salir a la realidad y practicar. Es recomendable sumar momentos de práctica por fuera del ámbito de estudio, es decir, salir en búsqueda de personas que hablen inglés ya sea nativos o que están aprendiendo como tú e intentar mantener una conversación en la vida real. Hablar acerca de cómo te sientes, qué planes tienes, o expresar tu opinión acerca de un tema de actualidad te permitirá incorporar el nuevo idioma a tu vida de forma orgánica. Otra opción es hablar contigo mismo en voz alta. Así sea una descripción de lo que estás haciendo, o un cúmulo de pensamientos aparentemente sin demasiado sentido, puede ayudarte porque al estar solo, la presión de equivocarte será menor y puede que te des cuenta de que se te da mejor de lo que creías.

Tal vez este sea el factor más determinante a la hora de expresarse con fluidez. Si estás todo el tiempo pensando en que existe la posibilidad de que cometas un error, probablemente lo harás. Lo curioso es que lo harás de todos modos, porque es normal equivocarse cuando uno está aprendiendo algo nuevo, pero al poner el foco en el error, empañar todo lo demás y la ansiedad se apodera de tu mente 2 veces: previamente y luego una vez que ya te has equivocado. Por supuesto que no tiene el mismo impacto equivocarse cuando hablas con un amigo que si esto mismo ocurre en otro ámbito, ya sea laboral o profesional. Pero es necesario que como seres humanos entendamos de una vez que los errores son necesarios para poder avanzar en el estudio de cualquier materia. Te recomendamos consultar este artículo de la BBC en donde presentan los 6 motivos por los cuales equivocarse está bien.

No se trata de una competencia con los demás, sino contigo mismo o misma. Si cada vez que participas de una conversación, estás poniendo el foco en cuánto mejor se expresan los demás, en vez de en validarte a ti mismo/a y a todo lo que has logrado aprender en el tiempo que sea que llevas intentándolo, estás perdido/a. Cada persona tiene sus propios tiempos de aprendizaje, y es fundamental conocer el propio y respetarlo. No se trata de una carrera, no hay prisa. Lo importante es ser capaces de disfrutar de los avances, reírse de los errores y así ir nutriendo la autoconfianza. En el siguiente artículo, encontrarás más información sobre Cómo tener confianza en uno/a mismo/a.

Este artículo es meramente informativo, en Psicología-Online no tenemos facultad para hacer un diagnóstico ni recomendar un tratamiento. Te invitamos a acudir a un psicólogo para que trate tu caso en particular.

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