Todas las emociones, tanto aquellas que nos resultan agradables como las que nos resultan desagradables, cumplen una función adaptativa. Las emociones nos permiten adaptarnos a nuestro medio, nos mueven a la acción y nos revelan mensajes que debemos siempre atender y gestionar. Aunque no lo parezca, estar triste es tan adaptativo como estar alegre.
En ocasiones, sin embargo, las emociones pueden convertirse en patológicas y más allá de la dimensión entre agradable y desagradable, nos provoquen un intenso malestar. La tristeza puede adquirir una intensidad tal que deje de resultar adaptativa y pase a ser dañina para la persona que la padece, denominándose hipotimia. En el siguiente artículo de Psicología-Online desarrollamos el concepto de hipotimia: qué es, causas, síntomas y tratamiento.
Qué es la hipotimia en psicología
El término hipotimia se refiere a la tristeza patológica. Según el diccionario de psicología de la Asociación Americana de Psiquiatría[1], se trata de un término obsoleto referido a dicha alteración del estado de ánimo y que está presente en casos de depresión mayor.
Diferencia entre hipotimia y tristeza
Como hemos adelantado en la introducción, las emociones son necesarias para el ser humano por su valor adaptativo. Pese a que la tristeza resulta ser una emoción desagradable, es tan importante como aquellas que nos producen sensaciones placenteras como la alegría.
Un ejemplo de tristeza adaptativa la encontramos en los procesos de duelo (exceptuando, por supuesto, los casos de duelo complicado o patológico). En el proceso de duelo las personas se sienten tristes y es esta tristeza la que les permite adaptarse a un nuevo contexto en el que ya no se encuentra aquello que ha perdido (su familiar, su mascota, etc.).
Cuando nos referimos a la tristeza patológica, la emoción ya no cumple su función adaptativa. La emoción provoca un intenso malestar a la persona e interfiere en su vida cotidiana (en el área laboral, educativo, familiar, etc.).
La definición de la Asociación Americana de Psiquiatría que hemos referido anteriormente, relaciona la hipotimia con el trastorno de depresión mayor, un trastorno recogido en la clasificación diagnóstica DSM-5[2] de la misma asociación. No obstante, la hipotimia también puede aparecer en otros cuadros diagnósticos como por ejemplo el trastorno bipolar o el trastorno esquizoafectivo, en los que también se dan episodios depresivos mayores.
Causas de la hipotimia
La causa por la que las personas se sienten tristes pueden ser muy diversas, por lo que el profesional deberá valorar el caso en particular y determinar cuáles son los mecanismos que están provocando la hipotimia.
No obstante, dada la vinculación que hace la Asociación Americana de Psiquiatría de la hipotimia con el trastorno depresivo mayor, repasamos a continuación cuáles son los modelos explicativos en el desarrollo de dicho trastorno.
En primer lugar, biológicamente se han establecido explicaciones genéticas y problemas endocrinos que explican la aparición de sintomatología depresiva. La hipótesis monoaminérgica, por otro lado, apunta que sería un déficit de noradrenalina, serotonina y/o dopamina lo que explicaría los síntomas.
En segundo lugar, desde la psicología se han propuesto explicaciones desde diferentes perspectivas:
- Psicodinámica.
- Conductual (centrada en aspectos como la disminución del reforzamiento positivo).
- Cognitiva (que cuenta con teorías como la teoría de la indefensión aprendida o la teoría de Beck).
Síntomas de la hipotimia
La hipotimia es, por sí misma, un síntoma que aparece y/o puede aparecer en diferentes trastornos psicológicos. En el caso del trastorno de depresión mayor del DSM-5, el estado de ánimo deprimido es, precisamente, uno de los dos síntomas necesarios para su diagnóstico y que consiste en la experimentación de tristeza, sensación de desesperanza, vacío, irritabilidad en el caso de la población infanto-juvenil, etc.
La hipotimia se caracteriza por la disminución del estado de ánimo, la sensación de abatimiento, la lentitud y la inexpresión.
Diferencia entre hipotimia, distimia y depresión
¿A qué trastornos de asocia la hipotimia? Este síntoma, se asocia principalmente con los trastornos depresivos. Mientras que la hipotimia es el síntoma que describe el estado de ánimo bajo, tanto la distimia como la depresión son trastornos psicológicos que engloban otros síntomas y que deben cumplir una serie de criterios para ser diagnosticados.
Junto al estado de ánimo deprimido, tristeza patológica o hipotimia podemos encontrar también los siguientes síntomas:
- Pérdida de interés o placer por todas o casi todas las actividades. La incapacidad por sentir placer se llama anhedonia, mientras que la pérdida del interés recibe el nombre de apatía.
- Pérdida o aumento de peso.
- Problemas de sueño: insomnio o hipersomnia.
- Problemas psicomotores: agitación o retraso psicomotor.
- Fatiga o pérdida de energía.
- Problemas de concentración, toma de decisiones o dificultad en la capacidad de pensar.
- Sentimiento de inutilidad o culpa inapropiada.
- Pensamientos de muerte recurrentes o ideas suicidas.
En caso de presentar varios de estos síntomas, podríamos estar hablando de un trastorno del estado del ánimo, como los que veremos a continuación.
La distimia es un trastorno psicológico caracterizado por un estado de ánimo deprimido, que presenta varios de los síntomas mencionados por lo menos durante dos años. En el siguiente artículo encontrarás Qué es la distimia: definición, síntomas y tratamiento.
Por otro lado, encontramos la depresión mayor, otro trastorno del estado de ánimo que presenta por lo menos 5 de los síntomas mencionados durante almenos 2 semanas.
Tratamiento de la hipotimia
La tristeza patológica o hipotimia, como ya hemos apuntado, es un síntoma que suele aparecer junto a otros síntomas, formando un trastorno psicológico. Dependiendo de en qué contexto aparezca deberemos valorar un tratamiento u otro. En este artículo vamos a repasar los tratamientos para los trastornos depresivos siguiendo el capítulo de Carrobles, J.A. (2014)[3].
Tratamiento médico
En cuanto al tratamiento médico o psiquiátrico de la hipotimia, se utilizan diferentes estrategias:
- Administración de fármacos antidepresivos. En este artículo explicamos los Tipos de antidepresivos y para qué sirven.
- Prescripción de estabilizadores del estado de ánimo.
- Terapia electroconvulsiva. En el siguiente artículo hablamos de qué es la Terapia electroconvulsiva y para cómo se utiliza.
- Otras técnicas de estimulación cerebral como la estimulación magnética transcraneal.
Tratamiento psicológico
Por otro lado, en cuanto al tratamiento psicológico de la hipotimia (y demás síntomas de un trastorno depresivo), se utiliza la terapia cognitivo conductual. La terapia cognitiva conductual cuenta con una serie de técnicas que pueden ser aplicadas en función de las necesidades del caso. La evaluación de cada caso esclarecerá las causas que están provocando la bajada en el estado de ánimo y, dependiendo de cuáles sean dichas causas, se escogerán unas técnicas u otras. Entre ellas podemos encontrar:
- Activación conductual o programa de actividades agradables. Aquí hablamos de las Técnicas conductuales del tratamiento de la depresión.
- Terapia de solución de problemas. En este artículo encontrarás más información sobre las Técnicas de solución de problemas.
- Terapia cognitiva de la depresión de Beck. Aquí explicamos qué es y en qué consiste la terapia cognitiva de Aaron Beck.
- Programa de afrontamiento de la depresión (Lewinsohn).
Por último, la terapia interpersonal ha mostrado buena evidencia en el tratamiento de la depresión.
Este artículo es meramente informativo, en Psicología-Online no tenemos facultad para hacer un diagnóstico ni recomendar un tratamiento. Te invitamos a acudir a un psicólogo para que trate tu caso en particular.
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- Asociación Americana de Psiquiatría (2020). APA Dictionary of Psychology. Recuperado de https://dictionary.apa.org
- Asociación Psiquiátrica Americana (2014). DSM-5. Guía de consulta de los criterios diagnósticos del DSM-5-Breviario. Madrid: Editorial Médica Panamericana.
- Carrobles, J.A. (2014) Trastornos Depresivos. En Caballo, V.E., Salazar, I.C. Y Carrobles, J.A. (2014) Manual de Psicopatología y Trastornos Psicológicos. Madrid. Pirámide.