Miedo a dormir: causas, síntomas y tratamiento

Miedo a dormir: causas, síntomas y tratamiento

¿Has tenido miedo a dormir en alguna ocasión? ¿Cuando se acerca la hora de irte a la cama sientes ansiedad o inseguridad? Aunque no es muy común, el miedo a dormir puede ser muy problemático en las personas que lo sufren ya que el descanso es fundamental para el funcionamiento de nuestras capacidades tanto físicas como cognitivas. En este artículo de Psicología-Online te explicamos los síntomas, las causas del miedo a dormir y posibles soluciones.

Síntomas del miedo a dormir

La hipnofobia o miedo a dormir, como su nombre indica, es el miedo a quedarse dormido, ya sea por la creencia de que puede morir mientras duerme o trastornos del sueño como pesadillas, terrores nocturnos, etc. que se puedan producir.

Los síntomas suelen aparecer cuando llega el momento de irse a la cama a dormir, aunque también se pueden ocasionar unas horas previas a acostarse ya que se anticipa el acontecimiento mentalmente.

Las personas que sufren miedo a dormir sienten ansiedad, sensación nerviosa o sentimientos de pánico, estas emociones suelen ir acompañadas de pensamientos negativos que llevan a la evitación de dormir. Estas emociones provocan el insomnio, evitando de esta manera quedarse dormido. Esto puede provocar síntomas como dolores de cabeza, problemas de memoria o irregularidad respiratoria. En ocasiones las nauseas, el vértigo y los temblores musculares aparecen por causa de la acumulación de tensión ante el acto de dormir.

Como el resto de fobias, el miedo a dormir es un miedo irracional y desmesurado hacia algo que nos produce sensaciones desagradables. En el caso del miedo a dormir llega a convertirse en un trastorno que afecta a nuestra vida cotidiana, puesto que la falta de sueño es perjudicial para nuestra salud física y mental.

 

Miedo a dormir solo

Del mismo modo que la mayoría de los cuidados básicos, el hábito de dormir se adquiere a una edad temprana. En muchas ocasiones los adultos no toman la consciencia suficiente de la importancia que tiene la transmisión de hábitos saludables, desde una visión amorosa y de serenidad, esto implica que muchas de las enseñanzas que adquirimos son a través de imposiciones y obligaciones.

Por ejemplo, cuando somos pequeños y comenzamos a dormir solos, irnos a la cama o despertarnos de madrugada puede provocar sentimientos de ansiedad produciendo la sensación de miedo. Dependiendo de cómo los adultos nos enseñen a manejar esta ansiedad, esta aumentara o disminuirá.

Los adultos damos por hecho muchos aspectos que fuimos adquiriendo de forma gradual al crecer y que damos por sentado, uno de ellos es la consciencia. La consciencia es la capacidad que tenemos de percibir la realidad y conectarnos con ella y por lo tanto esto implica entender la diferencia entre yo y el otro. Esto que parece tan básico, es una capacidad que se va desarrollando con los años y sobre todo con el conocimiento del mundo a diferentes niveles.

Cuando somos pequeños y comenzamos a desarrollar nuestra consciencia, el hecho de encontrarnos solos en una habitación o despertar de madrugada solos, puede conectar con el sentimiento de soledad. La soledad física del instante concreto, evoca el sentimiento de soledad emocional, esto conlleva sentimiento de ansiedad, tristeza y miedo.

En ocasiones, este sentimiento de soledad emocional se despierta en la edad adulta provocando el miedo a dormir solo, por lo tanto, este miedo vendría derivado de ansiedad y sentimientos de tristeza.

Miedo a lo desconocido mientras dormimos

El sueño es algo sobre lo que tenemos muy poco conocimiento, existen muchas situaciones que no sabemos definir mientras dormimos, por ejemplo, sensaciones que nos parecen reales, sueños lucidos, experiencias conocidas como “extrasensoriales” y muchas otras sin explicación aparente. Muchas de estas experiencias que desconocemos a priori, pueden ser desagradables, produciendo sensaciones que permanecen una vez nos hemos despertado y duran a lo largo del día.

En la actualidad vivimos en la creencia de que la ciencia es la única que puede aportarnos explicaciones fiables, sin tener en cuenta que se ve limitada, sobre todo a los estudios más rentables y subvencionados, que no siempre son los más necesarios para el conocimiento del ser humano. Esto ha conllevado que el sueño o los procesos que experimentamos los seres humanos mientras dormimos no sean de gran interés ni beneficio para la ciencia actual, minimizando las experiencias durante el sueño e intentando controlarlas únicamente a través de la medicación cuando son incómodas para la persona.

En la antigüedad existían templos donde las personas que experimentaban sensaciones extrañas o desconocidas iban a dormir y posteriormente eran acompañadas por profesionales que les ayudaban a integrar y comprender qué les pasaba, estos profesionales eran los therapeutes (therapeuein que significa cuidar y –tes en sentido de la persona) de ahí viene el término terapeuta.

Esto nos refleja la importancia que pueden llegar a tener los sueños y las sensaciones que se producen mientras dormimos, ya que nuestra mente se relaja y nuestro nivel de consciencia disminuye, dejamos de recibir estímulos externos y pueden aflorar percepciones internas de nuestro subconsciente, aportando información muy útil sobre nosotros mismos y nuestro propio desarrollo como seres humanos.

Como ejercicio, puedes llevar un diario de sueños, donde anotes lo que experimentas, las sensaciones y escenarios que evocas en estos sueños e intentar ver si tienen relación entre ellos. Es recomendable no buscar en libros o por internet el significado de lo que sueñas, aunque sí es cierto que existen códigos culturales que se pueden ver reflejados en nuestra forma de expresarnos en sueños, hay que tener en cuenta que cada individuo experimenta la realidad de una forma diferente según sus propias experiencias, por lo que no existe un lenguaje universal que pueda dar respuesta a tus propias percepciones subconscientes.

Miedo a dormir y no despertar

El miedo a dormir y no despertar es básicamente el miedo a la muerte. La muerte sigue siendo un tema tabú sobre todo en la sociedad occidental. De alguna manera todos nos hemos cuestionado algo sobre la muerte, en menor o mayor grado, casi siempre de forma superficial y desde una mirada lejana, como si fuese algo que les sucede a otros pero que nos queda lejos.

Muy contrario a este pensamiento superficial, la muerte es algo que todas las personas experimentaremos antes o después, y que en la mayoría de los casos será un tránsito vivido con temor, rechazo, incomodidad y muchos otros sentimientos negativos. Esta visión desesperada ante un tránsito natural como es la muerte, es debida al miedo que produce este tema en las personas, al miedo a lo desconocido que encontramos latente en los individuos, la cultura y la educación.

Por ejemplo, en la cultura Hindú, la muerte se vive con respeto y aceptación siendo esta una de las bases de la espiritualidad que caracteriza a esta cultura, puesto que si te planteas tu muerte es porque te planteas tu vida. Hacernos conscientes de la fragilidad de la vida nos acerca a la valoración, el respeto y el amor propio y del resto de formas de vida.

Cuando dormimos dejamos de tener control, tanto de nosotros como del entorno, en cierta medida esto es un acto de relajarse, de entregarse y permitir que suceda lo que tenga que suceder, sin ansiedad mental. Existen personas que sienten pánico ante el hecho de dejarse llevar, dejar de controlar y solo permitirse estar, dejando las pretensiones de lado, esto puede conllevar una conexión entre dormir y morir, debido al paralelismo de actitud profunda.

En el siguiente artículo encontrarás más información sobre Cómo superar el miedo a la muerte.

 

Causas del miedo a dormir

Las causas del miedo a dormir pueden venir por diversos factores. Como hemos visto, el miedo a dormir puede ser provocado por problemas del sueño como terrores nocturnos, pesadillas, sonambulismo, etc. El desconocimiento de estos u otros hechos provoca ansiedad e inseguridad ante situaciones desconocidas. Buscar información, consultar con profesionales realmente cualificados y con experiencia práctica pueden ser algunas de las soluciones a tener en cuenta.

También puede verse derivado por miedos relacionados con la ansiedad y el estrés o miedos más profundos relacionados con el vacío existencial o la falta de sentido en este caso el conocimiento propio, la búsqueda de sentido y el crecimiento interior puede ayudarte a resolver el malestar.

Tratamiento para el miedo a dormir

Los tratamientos del miedo a dormir pueden ser diversos según el caso y el grado en el que se encuentre la persona. Si tienes síntomas de ansiedad o crees tener miedo a dormir es fundamental que consultes con tu médico, una valoración profesional y efectiva es preciso para determinar por qué se producen las causas. Es recomendable hacerse analíticas descartando cualquier tipo de problema físico, ya que algún déficit hormonal puede producir insomnio, derivando en ansiedad por el hecho de no poder conciliar el sueño, esta confusión puede ocasionar la creencia errónea de padecer miedo a dormir como tal.

Adquirir conocimiento sobre nuestro cuerpo, funcionamiento físico, funciones psíquicas, mentales y corporales nos ayuda a entender qué nos pasa y porqué, responder estas preguntas desde nosotros mismos y no desde estadísticas consensuadas, nos favorece en nuestro desarrollo humano.

Los tratamientos psicológicos pueden ser efectivos, profesionales especializados en trastornos del sueño o ansiedad pueden acompañarte durante el proceso de recuperación.

Este artículo es meramente informativo, en Psicología-Online no tenemos facultad para hacer un diagnóstico ni recomendar un tratamiento. Te invitamos a acudir a un psicólogo para que trate tu caso en particular.

Si deseas leer más artículos parecidos a Miedo a dormir: causas, síntomas y tratamiento, te recomendamos que entres en nuestra categoría de Psicología clínica.

Bibliografía
  • André, C. (2005). Psicología del miedo: Temores, angustias y fobias. Barcelona: Kairós.
  • Frankl, V. (2015). El hombre en busca de sentido. Barcelona. Herder.
  • Krishnamurti , J. (1997). Libertad total. Barcelona. Kairós.
  • Longaker, C. (1998). Afrontar la muerte y encontrar esperanza. México. Grijalbo.
  • Nuland, S. (1995). Cómo morimos. Madrid. Alianza.
  • Panikkar, R. (1999) El Árbol del Paraíso. Madrid. Siruela.