Paroxetina: qué es, para qué sirve y efectos secundarios

La paroxetina es un medicamento que forma parte de un tipo de fármacos conocidos como inhibidores selectivos de recaptación de la serotonina, una sustancia que tiene como objetivo tratar la depresión y otras enfermedades del ámbito mental y psicológico.

La principal función de la paroxetina es aumentar la cantidad de serotoninas, una sustancia natural que nuestro cerebro ya posee y, de esa manera, ayudar el individuo a mantener el equilibrio mental.

Generalmente, el individuo que empieza un tratamiento con la paroxetina recibe la prescripción de una dosis inicial de 10 mg o 20 mg al día. Más adelante, si es necesario, el médico tiene la tendencia a aumentar a dosis de 20 mg o 50 mg al día.

La paroxetina es una sustancia que suele ser prescrita para su uso por la mañana. Solamente se prescribe para tomar por la noche en casos de que el individuo presente somnolencia durante el día y sea necesaria tratarla.

Si te preguntas para qué sirve la paroxetina, su objetivo es mejorar y equilibrar el estado mental del individuo. Esta sustancia es indicada tratar los siguientes trastornos:

• Depresión: trastorno grave del estado de ánimo. En este artículo, te contamos cómo salir de una depresión profunda.
• Trastorno obsesivo-compulsivo: la paroxetina ayuda el individuo con sus pensamientos intrusivos y con la necesidad que tiene de realizar algunas acciones de manera compulsiva. En este artículo encontrarás más información sobre el trastorno obsesivo-compulsivo,
• Trastorno de ansiedad social: si quieres saber cómo tratarlo, en este artículo te damos consejos para superar la fobia social.
• Trastorno de angustia vital: sea con y o sin agorafobia, aquí verás cómo superar la angustia vital.
• Trastorno de ansiedad generalizada: la paroxetina sirve para tratar el miedo extremo de la persona a interactuar, la preocupación excesiva difícil de ser controlada y otros síntomas que impiden de llevar una vida normal. Descubre más sobre el trastorno de ansiedad generalizada.
• Trastorno de estrés postraumático: la paroxetina auxilia la persona con los síntomas psicológicos que se desarrollan después de un evento traumático y atemorizante. No te pierdas este artículo si quieres saber cómo ayudar a una persona con trastorno de estrés postraumático.
• Trastorno de pánico: ayuda en aquellos ataques repentinos e inesperados de miedo extremo y preocupación. Descubre los síntomas y el tratamiento del trastorno de pánico con agorafobia.
• Trastorno disfórico premenstrual,
• Bochorno en menopausia: para la sensaciones de calor repentinos durante esta etapa vital, especialmente en el rostro, cuello y pecho, la paroxetina no siempre es eficaz.

Hay algunos casos en que la paroxetina es recomendada para tratamientos de dolores de cabeza crónicos, hormigueo en las manos y pies, causado por la diabetes, y ciertos problemas sexuales masculinos.

¿Qué efectos produce la paroxetina? El uso de la paroxetina puede producir algunos afecciones como reacción al medicamento. Veamos cuáles son los efectos secundarios de la paroxetina:

• Somnolencia.
• Disfunción sexual.
• Malformación congénita en fetos.
• Dolor de cabeza.
• Mareo.
• Debilidad.
• Dificultad para concentrarse.
• Nerviosismo.
• Confusión.
• Náuseas.
• Vómitos.
• Diarrea.
• Estreñimiento.
• Flatulencia.
• Dolor de estómago.
• Disminución del apetito.
• Pérdida o aumento de peso.
• Boca seca.
• Sudoración.
• Bostezos.
• Sensibilidad a la luz.
• Dolor de espalda, músculos o en cualquier parte del cuerpo.
• Sensibilidad o inflamación de las articulaciones.
• Rubor.

Es relevante añadir que la paroxetina puede producir el síndrome de retirada, es decir, cuando se retira la medicación bruscamente, sobre todo en personas que han tomado dosis altas por un largo periodo de tiempo. Ese síndrome conlleva la aparición de mareos, vómitos, diarrea, ansiedad o insomnio a partir de las 48 o 72 horas de haber retirado el fármaco. Para evitarlo, el tratamiento debe ser supervisado por un profesional sanitario.

Contraindicaciones de tomar paroxetina

Según la situación del paciente, no es bueno tomar este medicamento. Veamos cuáles son las contraindicaciones de tomar paroxetina:

• En mujeres embarazadas: la paroxetina ofrece un aumento de riesgo de malformaciones congénitas en fetos. Por eso, esa sustancia no es aconsejable que sea utilizada durante el embarazo. El médico debe buscar otras alternativas y propuestas de tratamiento para mujeres en esa condición.
• Mezclar con otros fármacos: el uso de la paroxetina asociado a otros medicamentos también puede ocasionar efectos secundarios peligrosos.
• En casos de diabetes, epilepsia, cardiopatías y trastornos hemorrágicos: hay que poner atención en el uso combinado con otros fármacos que afecten la función plaquetaria. En estos casos, la paroxetina también puede producir agitación psicomotora en las primeras semanas o pensamientos suicidas en pacientes con antecedentes de este tipo de comportamientos.

Este artículo es meramente informativo, en Psicología-Online no tenemos facultad para hacer un diagnóstico ni recomendar un tratamiento. Te invitamos a acudir a un psicólogo para que trate tu caso en particular.

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