Sesgo de la ilusión de control: qué es, consecuencias y ejemplos

Sesgo de la ilusión de control: qué es, consecuencias y ejemplos

Las personas a menudo sienten que tienen control sobre lo que realmente poseen. En general, por ejemplo, sienten que tienen más posibilidades de ganar una lotería si eligen los números ellas mismas. Este hecho se conoce como ilusión de control. Cuanto más creamos que somos capaces de evitar los efectos nocivos, gracias a nuestra habilidad y al control que podemos ejercer, menos arriesgado consideramos una sustancia, una actividad o una tecnología.

Es una ilusión cognitiva, ya que las personas no parecen darse cuenta de que el resultado de ciertos eventos no depende de su habilidad, sino del azar o la suerte. En este artículo de Psicología-Online, hablaremos sobre qué es sesgo de la ilusión de control, sus consecuencias y algunos ejemplos para que entiendas mejor cómo funciona.

Qué es la ilusión de control en psicología

La ilusión de control en psicología es la falsa sensación de tener influencia en los acontecimientos a través de la propia acción. Ellen Langer estudió la ilusión de control por primera vez a mediados de los 70. La psicóloga observó que las personas, cuando se encuentran en situaciones en las que lo que sucede objetivamente se atribuye principalmente al azar, se comportan de la misma manera que si lo que ocurriera dependiera de sus habilidades, aunque algunas habilidades básicas son necesarias para participar en algunas actividades de riesgo.

Cómo funciona el sesgo de la ilusión de control

El sesgo de la ilusión de control está determinado por una percepción distorsionada de las relaciones causales. Los resultados de numerosas investigaciones realizadas en los años 80 y 90 ponen de manifiesto esta prevalencia del mecanismo de ilusión de control frente a una actitud generalizada de optimismo poco realista.

Consecuencias del sesgo de la ilusión de control

El sesgo de la ilusión de control influye en las situaciones en las que el resultado está determinado mayoritariamente por el azar y en menor medida por las habilidades propias. En estos casos, al evaluar las posibilidades de éxito, se tiende a sobreestimar las capacidades personales, por lo que se percibe que estas determinarán el resultado final. Nada más lejos de la realidad, pues el azar acaba siendo el factor que determina el desenlace de estas situaciones.

La experiencia y la familiaridad con una tarea determinada aumentan la sensación de poder lograr un resultado favorable. Estos factores se asocian con un mayor rendimiento en las tareas de habilidad, pero no en las tareas aleatorias. Este es un aspecto que las personas tienden a olvidar, incluso en las tareas relacionadas con la habilidad. Por ejemplo, un accidente automovilístico es una situación que depende mayoritariamente del azar en el sentido de encontrarse en el lugar y en el momento determinado en que ocurre el suceso.

Ejemplos de ilusión de control

No hay nada mejor para entender un sesgo cognitivo como el de ilusión de control que ver algunos ejemplos sobre el mismo. Descúbrelos a continuación.

Ejemplo 1: Terremoto

Un ejemplo que describe muy el sesgo de ilusión de control es el siguiente:

  • Un hombre está abriendo la puerta oxidada de su garaje y, de repente, se desencadena un terremoto que devasta toda la región.
  • Quizás es hora de arreglarla", reflexiona el hombre. Esta forma de ilusión es una valoración demasiado confiada de la covariación entre la acción que quiere desarrollar y el evento que acaba de tener lugar.
  • El terremoto se considera un producto de la intención de arreglar la puerta.

Ejemplo 2: Kung Fu Panda

La película de Kung Fu Panda también contiene un ejemplo del sesgo de ilusión de control. En un momento dado, el maestro Oogway le dice al maestro Shifu: "Nunca enfrentarás tu destino hasta que no abandones la ilusión del control".

¿Qué quiere decir eso? Hace referencia a que tenemos la ilusión de poder controlar nuestra vida. Queremos que vaya en cierta dirección y tratamos de pilotarla movidos por una propensión totalmente racional y calculadora. Entonces, inexorablemente, sucede algo que altera nuestros planes, que nos obliga de alguna manera a tomar nota de que este control no es posible.

Ejemplo 3: Enfermedad

La ilusión de control se puede aplicar a la vida cotidiana y todos somos víctimas, incluso Steve Jobs. Como dice Don A. Moore, Ph. D en Comportamiento Organizacional, cuando al fundador de Apple le diagnosticaron cáncer de páncreas en 2003, este creyó que también podía controlar su enfermedad por sí mismo. Dijo no a la cirugía de urgencia y la quimioterapia, para curarse con acupuntura, remedios naturales y dieta.

Nueve meses después aceptó someterse a la cirugía, pero en ese momento el cáncer se había extendido irremediablemente y no pudieron curarlo. "Sobreestimar nuestras posibilidades de control puede llevarnos a cometer errores trágicos y costosos" comenta Moore, cómo rechazar un tratamiento médico.

Este artículo es meramente informativo, en Psicología-Online no tenemos facultad para hacer un diagnóstico ni recomendar un tratamiento. Te invitamos a acudir a un psicólogo para que trate tu caso en particular.

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Bibliografía
  • Arielli, E. (2000). Immagini dell’uomo. Introduzione alla psicologia sociale. Milán: Mondadori.
  • Sbattella, F., Tettamanzi, M. (et al.) (2013). Fondamenti di psicologia dell’emergenza. Milán: Franco Angeli.