TOC de comprobación: qué es, síntomas y tratamiento

TOC de comprobación: qué es, síntomas y tratamiento

¿Quién no ha vuelto alguna vez al coche para comprobar que lo había cerrado bien? ¿O quién no le ha dado varias veces al botón de cerrar el coche para asegurarse de que este estaba cerrado? Y es que todos en algún momento u otro tenemos dudas sobre si hemos hecho algo en concreto o no y nos surge esa imperiosa necesidad de comprobar que todo esta correcto, sobre todo cuando esta en juego nuestra seguridad.

El hecho de comprobar per sé no es malo ni extraño, pero, ¿qué pasaría si esto nos impidiera desarrollar con normalidad nuestras habilidades cotidiana? Podríamos hablar en este caso de TOC de comprobación, uno de los más frecuentes. El 80% de los casos de Trastorno Obsesivo Compulsivo son de comprobación.

Si quieres conocer más sobre este trastorno, en este artículo de Psicología-Online hablaremos acerca del TOC de comprobación: qué es, síntomas y tratamiento. ¡Sigue leyendo!

Qué es el TOC de comprobación

El trastorno obsesivo compulsivo se caracteriza por la presencia de obsesiones, contenido cognitivo que aparece en la mente y genera ansiedad, y compulsiones, todo aquello que hace la persona para contrarrestar las obsesiones, ya sean conductas o actos mentales. Para poder hablar de TOC es necesario que se manifiesten ambos.

En el caso concreto del TOC de comprobación, hablamos de una compulsión donde la conducta manifiesta característica es la necesidad de comprobar cualquier cosa. Lo que se pretende comprobar dependerá de la obsesión en cuestión. La obsesión de pensamiento acostumbra a tener el eje principal en el miedo a perder el control, a evitar incendios, miedo a que muera un ser querido, miedo a que le quiten sus pertenencias, etc.

Características del TOC de comprobación

Para determinar que estamos ante un caso de TOC de comprobación, la obsesión deberá tener las siguientes características:

  • Persistente: se repite. El pensamiento no debe ser puntual, ya que todos podemos tenerlo en algún momento.
  • Resistente: la persona hace cosas para no volver a tener ese tipo de pensamientos.
  • De exposición pasiva: la obsesión aparece en la cabeza de la persona. Se experimenta como propia y sin sentido.
  • Egodistónica: genera malestar y crea interferencias en la vida del sujeto.

Además de la presencia de la obsesión, si la persona sufre de TOC de comprobación también tendrá compulsiones, es decir, conductas manifiestas repetitivas, a modo de estereotipias o encubiertas, que en sí mismas no son placenteras, ni tampoco dan lugar a alguna actividad útil.

En los casos de TOC de comprobación no siempre habrá una conexión realista o lógica, es decir, está presente la irracionalidad conocida y la resistencia, lo que puede aliviar la tensión. Por lo tanto, las compulsiones previenen el malestar de la obsesión con una eficacia a corto plazo.

Síntomas del TOC de comprobación

¿Cómo darme cuenta si tengo TOC de comprobación? Entre los tipos de TOC, el síntoma principal que gira entorno a este es la sensación de control y la necesidad de comprobación constante, pero también hay otras formas en las que se manifiesta.

A continuación, veremos los principales síntomas del TOC de comprobación:

  • Evitación y restricciones autoimpuestas.
  • Búsqueda de tranquilidad.
  • Rituales cognitivos.
  • Atención a la información negativa.
  • Desesperanza y preocupación.
  • Rumiación.
  • Altos niveles de activación fisiológica.
  • Cambios en las funciones corporales.
  • Trastornos del sueño.
  • Aparición de síntomas ansiosos.
  • Aparición de síntomas depresivos.
  • Malestar.
  • Consumo excesivo de alcohol, fármacos sedantes, hipnóticos o ansiolíticos.
  • Sensación de culpa y sentimientos patológicos de responsabilidad.

Tratamiento del TOC de comprobación

Si te preguntas cómo curar el TOC de comprobación, muchos autores, incluidas versiones anteriores a la 5ª edición del Manual diagnóstico y estadístico de los trastornos mentales (DSM)[1], entienden el trastorno obsesivo compulsivo como un tipo de trastorno de ansiedad. Por este motivo, encontramos tantas similitudes en sus tratamientos, siendo los enfoques cognitivos de la terapia cognitivo-conductual los que han demostrado tener una mayor eficacia.

Por un lado, para superar el TOC de comprobación, se suele acompañar la terapia cognitivo-conductual con psicofármacos. Los más utilizados son la clomipramina, la fluoxetina y fluvoxamina.

Otro tipo de tratamiento del TOC de comprobación que esta mostrando eficacia es la Estimulación Cerebral Profunda (ECP). Algunos expertos hablan de aplicarla en los núcleos basales o de haces de fibras conectados a ellos y otros, sin embargo, exponen que se logra una mayor eficacia aplicada al núcleo subtalámico. Un punto positivo de esta terapia es que es reversible.

Psicocirugías para tratar el TOC de comprobación

Además, para el tratamiento del TOC de comprobación se han utilizado otras terapias, cada vez más en desuso, que podrían llamar la atención a más de uno:

  • Cingulotomía: destrucción quirúrgica de haces de fibra específicas de la zona subcortical del lóbulo frontal, con resultados positivos y una tasa de éxito razonable.
  • Capsulotomía: otra operación quirúrgica en la que se destruye una región del fascículo del cíngulo.

Estos procesos son irreversibles por lo que solo se deberá acudir a ellos como último recurso, ya que pueden aparecer efectos colaterales adversos como dificultad para planificar conductas, apatía o dificultad de inhibición de respuestas no aceptadas socialmente.

Este artículo es meramente informativo, en Psicología-Online no tenemos facultad para hacer un diagnóstico ni recomendar un tratamiento. Te invitamos a acudir a un psicólogo para que trate tu caso en particular.

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Referencias
  1. American psychiatric association, (2014). Manual diagnóstico y estadístico de los trastornos mentales DSM – 5. Madrid, España. Editorial medica panamericana.
Bibliografía
  • Belloch, A., Sandín, B., Ramos, F., (2009). Manual de psicopatología, volumen II. Madrid. McGraw Hill / Interamericana de España, S.A.U.
  • Carlson, N. R. (2014). Fisiologia de la conducta. Madrid. Pearson Education, S.A.
  • Labrador, F. J., (coord.) (2008). Técnicas de modificación de conducta. Madrid. Pirámide.