Trastorno de movimientos estereotipados

Trastorno de movimientos estereotipados

La característica esencial del trastorno de movimientos estereotipados es un comportamiento motor repetitivo, que suele parecer impulsivo y no es funcional (Criterio A). Este comportamiento motor interfiere las actividades normales o da lugar a lesiones corporales autoinfligidas suficientemente significativas para requerir tratamiento médico (o que así ocurriría si no se tomaran medidas protectoras) (Criterio B). Si hay retraso mental, el comportamiento estereotipado o autolesivo es lo bastante grave como para convertirse en un objetivo terapéutico (Criterio C).

Trastorno de movimientos estereotipados

El comportamiento no se explica mejor como una compulsión (como en el trastorno obsesivo-compulsivo), un tic (como en los trastornos de tics), una estereotipia que forme parte de un trastorno generalizado del desarrollo o una tracción del cabello (como en la tricotilomanía) (Criterio D). El comportamiento tampoco se debe a los efectos fisiológicos directos de una sustancia ni a una enfermedad médica (Criterio E). Los comportamientos motores deben persistir por lo menos durante 4 semanas (Criterio F). Los movimientos estereotipados pueden incluir agitar las manos, balancearse, jugar con las manos, golpetear con los dedos, girar objetos, dar cabezazos, morderse, pincharse la piel o los orificios corporales, o golpear distintas partes del propio cuerpo.

A veces el sujeto utiliza un objeto para realizar estos comportamientos. Los comportamientos en cuestión pueden provocar lesiones permanentes e incapacitantes, que a veces hacen peligrar la vida del sujeto. Por ejemplo, unos cabezazos o golpes contundentes pueden producir cortes, hemorragias, infecciones, desprendimientos de retina y ceguera. Especificaciones El clínico puede especificar con comportamiento auto lesivo si el comportamiento provoca daño corporal que requiera tratamiento específico (o que podría provocar daño corporal si no se utilizaran medidas protectoras).

Síntomas y trastornos asociados

Características descriptivas y trastornos mentales asociados. El sujeto puede recurrir a métodos de autocontención (p. ej., mantener las manos bajo el jersey, en los pantalones o en los bolsillos) a fin de intentar controlar los comportamientos autolesivos. Cuando se interfiere la autocontención, se reemprenden los comportamientos. Si los comportamientos son extremos o resultan repulsivos a otras personas, pueden aparecer complicaciones psicosociales por la exclusión que sufra el sujeto respecto de ciertas actividades sociales y comunitarias. El trastorno de movimientos estereotipados aparece con frecuencia asociado al retraso mental. Cuanto más grave es el retraso, tanto mayor es el riesgo de comportamientos autolesivos.

Este trastorno también puede aparecer asociado a déficit sensoriales graves (ceguera y sordera) y puede ser más frecuente en ambientes institucionales, donde el sujeto recibe una estimulación insuficiente. Los comportamientos autolesivos aparecen en algunas enfermedades médicas asociados a retraso mental (p. ej., síndrome de X frágil, síndrome de Lange y especialmente síndrome de Lesch-Nyhan, que se caracteriza por automordeduras graves). Hallazgos de laboratorio. Si hay comportamientos autolesivos, los datos de laboratorio reflejarán su naturaleza y gravedad (p. ej., anemia por pérdida crónica de sangre a causa de una hemorragia rectal autoinfligida). Hallazgos de la exploración física y enfermedades médicas asociadas.

Pueden observarse signos de lesiones crónicas en los tejidos (p. ej., magulladuras, señales de mordedura, cortes, arañazos, infecciones dérmicas, fisuras rectales, cuerpos extraños en los orificios corporales, trastornos visuales debidos a vaciamiento ocular o catarata traumática y fracturas por deformaciones óseas). En casos menos graves puede haber una irritación crónica de la piel o callos por mordiscos, pinchazos, arañazos o secreción salival. Síntomas dependientes de la edad y el sexo Los comportamientos autolesivos se producen en individuos de cualquier edad. Hay indicios de que los cabezazos son más prevalentes en los varones (en una proporción aproximada de 3:1) y las automordeduras lo son en las mujeres.

Prevalencia

Hay muy poca información acerca de la prevalencia del trastorno de movimientos estereotipados. Las estimaciones de prevalencia de comportamientos autolesivos en sujetos con retraso mental varían del 2 al 3 % en niños y adolescentes que viven en la comunidad y aproximadamente el 25 % en adultos con retraso mental grave o profundo que viven en instituciones. Curso No existe una edad típica de inicio o un patrón de inicio por trastorno de movimientos estereotipados. Dicho inicio puede seguir a un acontecimiento ambiental estresante. En sujetos no verbales con retraso mental grave, los movimientos estereotipados pueden ser provocados por una enfermedad médica dolorosa (p. ej., una infección del oído medio que dé lugar a cabezazos).

Los movimientos estereotipados suelen ser máximos en la adolescencia, y a partir de este momento pueden declinar gradualmente. Sin embargo, especialmente en sujetos con retraso mental grave o profundo, los movimientos pueden persistir durante años. El objetivo de estos comportamientos cambia con frecuencia (p. ej., una persona puede incurrir en morderse la mano, desaparecer este comportamiento, y a continuación empezar a golpearse la cabeza). Diagnóstico diferencial Los movimientos estereotipados pueden asociarse a retraso mental, sobre todo en sujetos situados en ambientes no estimulantes.

El trastorno de movimientos estereotipados sólo debe diagnosticarse en sujetos cuyo comportamiento estereotipado o autolesivo sea lo bastante grave para constituir un objetivo terapéutico. Movimientos estereotipados repetitivos son una característica de los trastornos generalizados del desarrollo. El trastorno de movimientos estereotipados no se diagnostica si las estereotipias se explican mejor por la presencia de un trastorno generalizado del desarrollo. Las compulsiones del trastorno obsesivo-compulsivo suelen ser más complejas y ritualistas, y se realizan como respuesta a una obsesión o siguiendo normas que deben aplicarse rígidamente.

Es relativamente sencillo diferenciar los movimientos complejos característicos del trastorno de movimientos estereotipados de los tics simples (p. ej., parpadeo), pero es menos fácil el diagnóstico diferencial con tics motores complejos. En general, los movimientos estereotipados parecen ser más motivados e intencionados, mientras que los tics tienen una calidad más involuntaria y no son rítmicos.

Por definición, en la tricotilomanía el comportamiento repetitivo se limita a tracciones del cabello. Las lesiones autoinducidas del trastorno de movimientos estereotipados deben distinguirse del trastorno facticio con predominio de signos y síntomas físicos, donde la motivación de la autolesión es asumir el papel de enfermo. La automutilación asociada a ciertos trastornos psicóticos y trastornos de la personalidad es premeditada, compleja y esporádica, y tiene un significado para el sujeto dentro del contexto del trastorno mental grave subyacente (p. ej., es el resultado de un pensamiento delirante).

Los movimientos involuntarios asociados a enfermedades neurológicas (como en la enfermedad de Huntington) suelen seguir un patrón típico, estando presentes los signos y síntomas del trastorno neurológico en cuestión. Los comportamientos auto estimulantes de los niños pequeños propios de su nivel de desarrollo (p. ej., succión del pulgar, balanceo y cabeceo) suelen ser muy limitados y pocas veces producen lesiones que requieran tratamiento. Los comportamientos auto estimulantes en individuos con déficit sensoriales (p. ej., ceguera) no suelen ocasionar disfunciones ni autolesiones.

Criterios para el diagnóstico del Trastorno de movimientos estereotipados

  1. Comportamiento motor repetitivo, que parece impulsivo, y no funcional (p. ej., sacudir o agitar las manos, balancear el cuerpo, dar cabezazos, mordisquear objetos, automorderse, pinchar la piel o los orificios corporales, golpear el propio cuerpo).
  2. El comportamiento interfiere las actividades normales o da lugar a lesiones corporales autoinfligidas que requieren tratamiento médico (o que provocarían una lesión si no se tomaran medidas preventivas).
  3. Si hay retraso mental, el comportamiento estereotipado o autolesivo es de gravedad suficiente para constituir un objetivo terapéutico.
  4. El comportamiento no se explica mejor por una compulsión (como en el trastorno obsesivo-compulsivo), un tic (como en el trastorno por tics), una estereotipia que forma parte de un trastorno generalizado del desarrollo o una tracción del cabello (como en la tricotilomanía).
  5. El comportamiento no se debe a los efectos fisiológicos directos de una sustancia ni a una enfermedad médica.
  6. El comportamiento persiste durante 4 semanas o más.

Especificar si: Con comportamiento autolesivo: si el comportamiento da lugar a daño corporal que requiera tratamiento específico (o que daría lugar a daño corporal si no se tomaran medidas protectoras).

Este artículo es meramente informativo, en Psicología-Online no tenemos facultad para hacer un diagnóstico ni recomendar un tratamiento. Te invitamos a acudir a un psicólogo para que trate tu caso en particular.

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