Veo arañas cuando me despierto ¿qué puede ser?

Unas de las preguntas que se dan en con consulta son: "me desperte y vi una araña, ¿por qué?" o "veo arañas cuando me despierto, ¿qué puede ser?" Ver arañas inexistentes al despertarse deberse a las alucinaciones hipnopómicas. En caso de verlas antes de dormir serían alucinaciones hipnagógicas.Las alucinaciones hipnopómicas y hipnagógicas son alucinaciones, es decir, una percepción sensorial sin un estímulo externo real que las desencadene, que aparecen en los períodos de transición de sueño-vigilia y viceversa, es decir, al entrar en el sueño y al despertarse de él.

Diferencia entre alucinaciones hipnagógicas e hipnopómpicas

La diferencia entre ambas reside en el momento de su aparición, ya que las alucinaciones hipnagógicas se producen cuando la persona pasa de la vigilia al sueño, mientras que las alucinaciones hipnopómicas aparecen cuando la persona está despertando del sueño. Las alucinaciones hipnopómicas y hipnagógicas pueden aparecer como un fenómeno de forma aislada o formar parte de la sintomatología de un trastorno, como en la parálisis del sueño o en la narcolepsia.

1. Tipos de percepción sensorial: como hemos comentado, las alucinaciones son percepciones sensoriales y en este caso, las categorías sensoriales más frecuentes en las alucinaciones hipnopómicas y hipnagógicas son las visuales, por ejemplo ver arañas al despertarse y/o auditivas, por ejemplo escuchar pasos, música,… Sin embargo, también pueden ser olfativas, gustativas, táctiles, térmicas y cenestésicas.
2. Simultaneidad: la aparición de una alucinación sensorial no exime la aparición de otra, es posible tener alucinaciones de diferentes modalidades sensoriales a la vez y su combinación aumenta el grado de realismo de la alucinación, de modo que como más sentidos se incorporen a la alucinación, más real será.
3. Aparición y duración: lo más frecuente es que su aparición sea de forma esporádica, aunque también pueden aparecer de forma consecutiva, con menor frecuencia. Su duración es muy breve y dinámica, manteniendo la alucinación durante escasos segundos.
4. Prevalencia: la aparición de las alucinaciones hipnopómicas y hipnagógicas es más recuente en la infancia y la adolescencia y aunque pueden mantenerse en la edad adulta, estas aparecen en menor frecuencia. Sin embargo, se estima que el 50% de la población experimenta una alucinación de este tipo a lo largo de toda su vida.
5. Frecuencia: Las alucinaciones hipnagógias, las que se producen en la transición de la vigilia al sueño, son mucho más frecuentes y están más estudiadas que las alucinaciones hipnopómicas, las que se producen en el despertar.

Tal como hemos indicado previamente, la tipología de alucinación más frecuente es la visual, junto a la auditiva y en este artículo nos centraremos en las alucinaciones visuales:

1. Permanencia de la imagen: cuando la persona percibe la imagen producida por la alucinación, esta imagen puede cambiar o transformarse en otra muy rápidamente y su duración tiende a ser de pocos segundos. Aunque la duración de las alucinaciones visuales sea muy breve, estas pueden llegar a ser muy vívidas y reales.
2. Tamaño: las imágenes pueden adoptar diferentes tamaños, siendo generalmente clasificadas en pequeñas (micropsias) o gigantescas (megalopsias).
3. Temática: las imágenes hipnopómicas tienden a caracterizarse por su gran variedad de temáticas, no obstante se han identificado los siguientes tipos de alucinaciones visuales en ellas:

• Formas amorfas: como nubes, ondas,…
• Formas con diseño: figuras geométricas, formas, simetrías,…
• Rostros de personas, animales y objetos.
• Elementos de la naturaleza.
• Letras y escritos: el lenguaje de ellos puede ser tanto un lenguaje real como imaginario.

¿Por qué se san estás alucinaciones? Las alucinaciones hipnagógicas y hipnopómicas tienden a aparecer como un fenómeno aislado, sin la necesidad de estar asociado a ningún trastorno. En este caso, su aparición se relaciona a niveles elevados de estrés y ansiedad, así como el cansancio o un horario irregular del sueño y por ello, no mantienen ninguna implicación en nuestra salud, son inofensivas y no patológicas. Por este motivo, tienden ocasionalmente a ser denominadas alucinaciones fisiológicas, porque pueden presentarse en las personas sanas, sin la necesidad de que haya un trastorno presente.

Sin embargo, cuando estas aparecen de forma repetitiva, su frecuencia puede estar relacionada con algún trastorno del sueño, siendo los más frecuentes la parálisis del sueño y la narcolepsia.

• Parálisis del sueño: trastorno que forma parte de las parasomnias. Las parasomnias son consideradas un conjunto de comportamientos o fenómenos de carácter anormal que aparecen en el sueño y su clasificación dependerá de la fase del sueño en la que tengan lugar, siendo más frecuente su aparición entre una fase y otra. En el sigueinte artículo encontrarás los tipos y fases del sueño y sus características. La parálisis del sueño provoca que quien lo padece, se siente incapaz de moverse de forma voluntaria, mientras se está quedando dormido o al despertar, durante unos 20 a 60 segundos.
• Narcolepsia: cuando la intensidad de las alucinaciones es mucho mayor, puede ser debida a un cuadro de narcolepsia, es decir, un trastorno del sueño caracterizado por la excesiva somnolencia presentada durante el día.

Ante ello, hablaríamos de un trastorno, mientras que si su aparición es aislada y no repetitiva, estas alucinaciones no son consideradas un trastorno. Cabe añadir que estas deben ser diferenciadas de las alucinaciones producidas en trastornos psiquiátricos, tales como la esquizofrenia. Ante todo ello, debemos tener en cuenta que su aparición prolongada requiere la ayuda de un especialista.

Este artículo es meramente informativo, en Psicología-Online no tenemos facultad para hacer un diagnóstico ni recomendar un tratamiento. Te invitamos a acudir a un psicólogo para que trate tu caso en particular.

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