Cómo desenmascarar a una persona manipuladora

En psicología, la persona manipuladora es conocida como aquella que posee una personalidad maquiavélica. Estas personas suelen estar caracterizadas por tener comportamientos cínicos, sin principios y con tendencia a creer que la manipulación es la clave para obtener éxito en la vida.

Las personas manipuladoras, generalmente, poseen una falta de moralidad y preocupación por los sentimientos de los demás, por lo que no tienen remordimientos de aprovecharse de aquellos que les rodean. Se podría decir que una forma sencilla que no son capaces de empatizar con el resto de la sociedad.

Según se ha visto en algunos estudios, como el realizado por el psicólogo Jones (2011), estas personas no son para nada impulsivas, sino que tienden a reflexionar sobre la forma en que van a actuar, la cual suele ser muy prudente para, de esta forma, obtener el máximo beneficio personal.

Estas personas están fuertemente vinculadas a las mentiras y a los engaños con propósito, es decir, no mentirán sin razón alguna, si no que todos sus engaños tendrán una meta final. Usualmente, tienen la capacidad de detectar aquellas personas con personalidades débiles, de las cuales les será más fácil poder aprovecharse. Para ello, buscan las debilidades del resto de individuos y les hacen creer que con su ayuda van a poder superarlas, creando de este modo una sensación de agradecimiento y necesidad de devolver el favor en la persona. Es aquí cuando la relación dañina empieza, pues se crea un vínculo entre ambos que la persona manipuladora va a hacer todo lo posible para que no se rompa.

Estoy completamente segura de que todos conocemos una pareja en la cual una de las dos personas que la conforman es manipuladora y, por ello, ejerce cierto control sobre la otra. Esto no es nada extraño ni novedoso en nuestro mundo, al contrario, cada vez es más habitual verlo.

Las personas manipuladoras, como bien hemos dicho, se aprovechan de las debilidades y carencias emocionales de la otra persona para ejercer su influjo sobre ellas y poder obtener un control casi total sobre sus acciones e incluso sobre su personalidad.

Estas personas necesitan sentirse superiores al resto, por lo que no tendrán problemas para humillar a su pareja y desprestigiarla si esto va a dar a lugar a un aumento de su propia autoestima.

Según la psicología, las personas manipuladoras tienden a elegir distintos tipos de estrategias para ejercer su “poder”:

• Te hacen creer que son víctimas de la sociedad y que todo lo que les rodea va en contra de ellos, por lo que resulta casi imposible negarse a sus demandas.
• El manipulador dependiente. Su objetivo es hacerte creer que eres tú el superior de vuestra relación para que de algún modo hagas todo aquello que el “no es capaz de hacer”.
• Actúan de manera provocadora y retando. De este modo, consiguen que hagas lo que él quiera para evitar una disputa entre los dos.
• El desprestigiador se creerá el mejor de todos, el único capaz de realizar cualquier cosa y tratará por todos los medios resaltar los defectos del resto. La única forma de que ellos te presten su atención es mediante la realización de favores hacia su persona.

A continuación, te presentamos una serie de pautas que te pueden ayudar a desarmar a una persona manipuladora y a no caer en sus enredos:

1. Sé consciente. Todas las personas tenemos una serie de derechos ineludibles y si en algún momento de vuestra relación sientes que alguno de ellos puede ser violado, plantéate la posibilidad de estar siendo manipulado.
2. Pregúntale si la demanda que te hace es razonable. Hay veces que la persona manipuladora no es capaz de darse cuenta de que aquello que está pidiendo es irrazonable, pues su único objetivo es satisfacer sus necesidades inmediatas. Por ello, si consigues que la persona recapacite sobre la petición, es posible que llegue a retirar la demanda que te ha solicitado.
3. Identifica su comportamiento con distintas personas. Las personas manipuladoras tienden a actuar de manera distinta con distintas personas, pues han de emplear distintas estrategias de relación para poder obtener sus objetivos.
4. Mantén la distancia. Este punto lo añado aquí pues si has conseguido ver que una persona actúa de manera muy distinta dependiendo del resto de individuos que le rodean, te recomiendo que mantengas una distancia prudente con ella y que evites relacionarte directamente con ella a menos que te sea necesario.
5. Tómate tu tiempo para reflexionar. Pese a que con anterioridad hemos comentado que las personas manipuladoras no son impulsivas a la hora de actuar, sí que son muy impacientes en conocer la respuesta a una petición que hayan realizado, pues saben que cuanto más tiempo reflexione la otra persona, menor probabilidad habrá de que les digan que sí a su demanda.
6. Di NO. No tengas miedo a negarte a una petición realizada por ellos. Muchas veces, aceptamos realizar ciertos favores por tener la sensación de que les debemos algo, sin embargo, esto no es así. Sé firme a tus creencias y niégate a hacer aquello con lo que no te sientas cómodo ni estés de acuerdo. En el siguiente artículo, explicamos Cómo aprender a decir sin sentirse culpable.
7. No sientas culpa. El negarse a hacer un favor no es sinónimo de ser mala persona ni de que tengas la culpa de lo que ocurre a tu alrededor. Toma las decisiones pensando en tu bienestar.
8. Sé firme en tus decisiones. Las personas manipuladoras son capaces de reconocer la vulnerabilidad y el titubeo, por lo que si tienen la mínima sospecha de que en tu negación hay una mínima posibilidad de que sea un sí al final, van a tratar de aprovecharla a toda costa.
9. Controla tus emociones. Si ven que pierdes los estribos, van a utilizar esto a su favor, pues tenderán a hacerte sentir culpable para que aceptes sus demandas.
10. Acepta su personalidad. Estas personas no van a cambiar su forma de actuar, por lo que va a resultar casi imposible lograr que cambien su comportamiento. Te recomendamos que, si no eres capaz de lidiar con este tipo de comportamiento de manera que no te manipulen, lo mejor que vas a poder hacer es distanciarte.
11. Todo por escrito. Si tienes la impresión de que alguien está tratando de manipularte y aprovecharse de ti, nunca hagas un trato de palabra, pues usarán siempre este acto en su propio beneficio.

Este artículo es meramente informativo, en Psicología-Online no tenemos facultad para hacer un diagnóstico ni recomendar un tratamiento. Te invitamos a acudir a un psicólogo para que trate tu caso en particular.

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