Cómo saber si es amor o costumbre

En muchas ocasiones, el amor se concibe como “mariposas en el estómago" y cuando esta intensidad disminuye y llegan las decepciones, empiezan a cuestionarse si realmente siguen enamorados/as o su relación se ha vuelto aburrida. No obstante, es importante tener en cuenta que el amor no es lineal y atraviesa varios estadios, desde la atracción inicial, la fase de “luna de miel”, el desencanto o decepción hasta llegar al amor real y maduro.

La fase de amor maduro se caracteriza por la sensación de tranquilidad y estabilidad. Según la dra. Carla Marie Manly “estar verdaderamente enamorado de alguien a menudo se siente como tener una amistad genuina con la ventaja adicional de la atracción continua y la intimidad sexual”^[1]. Por lo tanto, el amor no es un estado permanente de entusiasmo, sino algo que se cultiva activamente y se nutre mediante acciones que le demuestran a la otra persona que es importante para ti.

Sin embargo, María Esclapez^[2] nos advierte de que muchas personas suelen considerar esta fase como una etapa aburrida de la relación en la que no hay amor, pero nada más lejos de la realidad. Sigue habiendo amor, solo que se vive de manera diferente. De hecho, es en esta fase donde se construye un compromiso fiel y verdadero y se toman las decisiones más profundas y racionales. La pareja se ve como un punto de apoyo y predomina la comunicación, el diálogo y la negociación.

¿Te sientes emocionalmente cercano/a a tu pareja? ¿Tu pareja se siente cercana a ti? ¿Con qué frecuencia compartes tus sentimientos con tu pareja? ¿Tu pareja comparte sus sentimientos contigo? Estos son algunos aspectos clave en la relación, ya que cuando una persona habla y la otra escucha atentamente, ofrece validación y muestra que le importa.

En un estudio dirigido por Laurenceau^[3] se señala que la capacidad de respuesta del oyente es fundamental para la construcción de una relación saludable. De este modo, cuando ya no compartes tus sentimientos con tu pareja o prefieres compartirlos con otra persona, la relación decaerá. Si esto se convierte en un hábito podría sugerir que os estáis distanciando.

A medida que la relación se consolida, tus sentimientos se vuelven más profundos y quieres conectarte profundamente con esa persona. Por el contrario, cuando las personas comienzan a separarse emocionalmente y a dejar de intercambiar su mundo emocional, esto será una señal de que la salud de la relación está decayendo y el amor podría estar convirtiéndose en costumbre por no priorizar la relación.

Tenemos ideas conscientes sobre nuestra pareja, tanto favorables como desfavorables, pero también tenemos ideas implícitas sobre nuestra pareja. Estos puntos de vista inconscientes se arraigan en los fundamentos de la pareja y pueden ser especialmente reveladores sobre el estado de una relación. Puedes tratar de reflexionar sobre preguntas como, por ejemplo, ¿qué piensa tu pareja de tu actitud, lo divertido que es estar contigo? ¿Cuál es tu primera reacción cuando tu pareja se equivoca? ¿Hay respeto o hay una respuesta despectiva?

Un estudio de la Universidad de Rochester^[4]apunta que las impresiones inconscientes negativas de la pareja, sobre todo en aquellos que tienen impresiones positivas bajas y negativas altas, pueden tener un mayor riesgo de ruptura. Muchas parejas temen romper el círculo por costumbre, sin embargo, las interacciones negativas con frecuencia debilitará el vínculo afectivo y el amor.

Las reacciones a las buenas noticias pueden dar una idea de la calidad de la relación. Por este motivo, las parejas que perciben reacciones menos constructivas a las buenas noticias (por ejemplo, menos entusiastas, más destructivas o pasivas) tienen más probabilidades de romper en los próximos meses en comparación con aquellas que celebran genuina y enérgicamente^[5].

Cuando no estás realmente enamorado de tu pareja, es común mostrar poco interés cada vez que surgen situaciones difíciles. Esto podría crear una mayor distancia y sentir la relación como una carga o una rutina en lugar de algo valioso que hay que cuidar. A su vez, esperarás a que solucione sus problemas y metas por su cuenta, sin asumir ninguna de sus cargas ni hacer todo lo posible para apoyarlo/a.

Por el contrario, cuando estás enamorado de tu pareja de forma genuina querrás permanecer a su lado en las buenas y en las malas.

Otra forma de saber si es amor o costumbre es cuando comienzas a perder interés después de la etapa de enamoramiento o luna de miel y no sientes la necesidad de intentar arreglarlo y/o poner más de tu parte (o de la de tu pareja).

Hay muchas maneras de amar a alguien, pero decir que lo amas "como persona" y que no estás "enamorado/a" a menudo indica que lo ves más como un amigo cercano, un compañero de rutina, que te importa mucho que como un amante del que estás enamorado. Si te sientes más como su compañero/a de piso que como su pareja puede ser una señal de que no estás realmente enamorado/a y lo que sientes se ha convertido en costumbre.

Las personas que están 'enamoradas' le brindan a su pareja tiempo y atención. Esto significa buscar tiempo de calidad e intimidad mutua de manera habitual. Por lo tanto, cuando estás enamorado de alguien, es más probable que hagas lo que sea necesario para verlo/a y pasar tiempo con esa persona. Por el contrario, si ni siquiera tienes ganas de ver a tu pareja, es posible que no estés enamorado/a.

En relación con el punto anterior, algunas parejas se ven atrapadas en una relación que recuerda más a la de compañeros de piso que de cónyuges. En estos casos, se dejan de lado los pequeños pero significativos hábitos de amor como, por ejemplo, cogerse de la mano, abrazarse, besarse o compartir bromas, entre otros detalles que permiten mostrar afecto y crear momentos felices en el día a día.

Por otro lado, la falta de gratitud puede evidenciarse en las críticas constantes que culpabilizan a la otra persona y le recuerdan sus defectos sin parar. En las relaciones saludables, los miembros de la pareja se sienten seguros y “mejorados” por la visión positiva que la otra persona tiene de ellos.

Por esta razón, poner énfasis en las cualidades positivas de la pareja y sentirse agradecido/a por tener a esa persona en nuestra vida, por imperfecta que sea, puede marcar la diferencia.

Otra forma de saber si es costumbre o estás realmente enamorado/a de tu pareja es reflexionar sobre si la tienes en cuenta en las decisiones importantes. De este modo, encontrarás tiempo para hablar con él o ella antes de tomar alguna decisión trascendental en tu vida, como por ejemplo dejar el trabajo o mudarte, para asegurarte de que el resultado funcione para ambos. A su vez, verás las metas y aspiraciones de tu pareja como propias y harás todo lo posible para apoyarla.

Por el contrario, si te preocupas por tu pareja pero no quieres compartir tus decisiones con ella, es posible que, aunque la aprecies, no estés enamorado de ella. En otras palabras, puedes desear lo mejor para tu pareja, pero no hasta el punto de tener que hacer sacrificios que reduzcan tu tiempo o energía.

En uno de sus estudios, Fletcher^[6] relaciona el estar enamorado con seguir encontrando cosas nuevas que amar de tu pareja, incluso después de haber estado juntos/as durante meses y años. Alguien enamorado está lleno de una pasión que puede disminuir, pero que volverá a encenderse antes de apagarse.

De esta forma, se considera que estás enamorado/a de tu pareja si estás renovando continuamente sentimientos positivos por esa persona como asombro, gratitud o respeto y estás aprendiendo cosas nuevas todos los días a medida que pasa el tiempo. En estos casos, sentirás que tu amor siempre está evolucionando en el buen sentido.

Por el contrario, las personas que se quieren porque están acostumbrados el uno al otro es más probable que se separen o terminen viviendo en una relación tóxica, a diferencia de las que están enamoradas que siempre encuentran formas de crecer juntas.

Por otro lado, si disfrutas pasando tiempo con tu pareja pero no te sientes atraído/a por ella, es posible que no estés realmente enamorado/a. A excepción de las personas dentro del espectro asexual, por lo general las relaciones necesitan un elemento de pasión, deseo o atracción física para pasar de la costumbre a estar enamorado.

Para averiguar cómo te sientes puedes tratar de comparar tus sentimiento cuando pasas el rato con amigos a los que aprecias y valoras con el tiempo en pareja. Si te preocupas por tu pareja de la misma manera que por otras personas en tu vida, ahí tienes tu respuesta.

Si sientes que la costumbre está volviendo aburrida la relación, puedes buscar nuevas formas de pasar tiempo juntos. En el siguiente artículo te explicamos cómo sorprender a tu pareja en la cama.

Desde reavivar una chispa que se apaga hasta mejorar la comunicación y comprometerse tras una discusión, cuando realmente amas a alguien estarás dispuesto/a a hacer prácticamente cualquier cosa para solucionar vuestros problemas. Cuando hay amor maduro y real, habrá un compromiso continuo para superar los obstáculos y dificultades juntos/as.

Todas las parejas pasan por altibajos, sin embargo, cuando lo que queda ya no es amor sino costumbre, no habrán esfuerzos reales para superar los problemas.

Darte cuenta de que tu relación se basa más en la costumbre que en el amor puede ser difícil, pero te abrirá las puertas para encontrar a alguien que realmente cumpla con todos los requisitos. Si quieres estar seguro/a de estar tomando la decisión correcta, en este artículo te explicamos cómo saber cuándo terminar una relación.

Este artículo es meramente informativo, en Psicología-Online no tenemos facultad para hacer un diagnóstico ni recomendar un tratamiento. Te invitamos a acudir a un psicólogo para que trate tu caso en particular.

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