Qué es la indiferencia asertiva y cómo aplicarla

La indiferencia es un sentimiento o estado afectivo neutro que a menudo se asocia con una ausencia de emociones y frialdad emocional. La persona indiferente aparentemente muestra desinterés hacia los demás, las relaciones y las realidades circundantes, sin preocuparse por las consecuencias y el sufrimiento de los demás. Asimismo, el indiferente está desapegado y continúa por su propio camino, sin tener en cuenta las exigencias de los demás y observando todo sin implicación ni atención.

La indiferencia asertiva es, por lo tanto, el comportamiento que parece desinteresado solo en apariencia y que es el resultado de la evaluación de los pros y los contras de la interacción en curso, simulado para ocultar la respuesta emocional a un determinado estímulo o evento. De ese modo, la persona que lo realiza no muestra externamente nada de sus sentimientos al interlocutor que, en consecuencia, solo percibe indiferencia, el estado ánimo típico de quien no siente inclinación ni rechazo hacia otros.

A su vez, se trata de un mecanismo de defensa que se activa cuando una persona se siente amenazada o potencialmente manipulada por el interlocutor para protegerse y mantener el desapego.

La indiferencia asertiva se origina a partir de la premisa de la existencia de un "juego de poder" dentro de la relación. Es decir, un individuo trata de prevalecer de alguna manera sobre el otro llevando a cabo comportamientos manipuladores o conflictivos.

¿Alguna vez un amigo o compañero te ha irritado con sus bromas y comentarios irónicos? Aplicando la indiferencia asertiva y mostrando un cierto número de veces que no damos espacio a sus bromas o sarcasmo podemos desactivar este comportamiento. Otro ejemplo podría ser cuando tenemos constantes diferencias con alguien que generan un malestar. En estos casos en los que podemos llegar a pensar que no podemos hacer nada para arreglarlo y que el diálogo es imposible, la mejor opción sería aplicar la indiferencia asertiva. Este hecho implica no ceder a las provocaciones, ignorar los comentarios ofensivos y, finalmente, renunciar a una conexión auténtica con esa persona. Cuando no entremos en su juego, tarde o temprano la persona abandonará ese tipo de comportamiento.

La indiferencia asertiva es, por lo tanto, una herramienta para manejar varias situaciones de conflicto de manera inteligente, ya que lo mejor que podemos hacer en ciertos casos es "no hacer nada". En entornos altamente competitivos, la indiferencia asertiva puede incluso ser una cuestión de supervivencia. No obstante, es importante mantenerse en contacto con nuestras emociones y evaluar cómo nos hacen sentir este tipo de relaciones.

La indiferencia asertiva se manifiesta en cualquier ámbito de relación, incluso dentro de la vida de pareja. En estos casos, este sentimiento puede ponerse en práctica en dos circunstancias principales:

1. Para probar cuánta influencia se ejerce sobre la pareja

Tanto en casos de relaciones en curso como en intentos de acercamiento para saber si hay esperanzas de volver a estar juntos, la indiferencia asertiva se utiliza para averiguar cuánta influencia se tiene sobre el otro. De esta forma, "no mostrar" lo que uno/a siente siente pone a la pareja en una posición de poder sobre la otra.

Si se utiliza como instrumento de seducción, la indiferencia tiene como objetivo desestabilizar el componente emocional de la otra persona a través de la creación de un vacío o una falta. No se dan respuestas claras, no se habla de sentimientos, las expectativas no son recíprocas y no se abren nunca debates en los que se pueda ejercer la escucha activa. En este caso, la duda es la que mantiene al otro miembro de la pareja en ascuas, creando un mecanismo de frustración e inseguridad.

2. Para sofocar el conflicto y evitar la escalada

Por otra parte, la mostrar indiferencia también puede convertirse en la mejor herramienta para evitar que una discusión empeore y pueda escalar a una situación desagradable. En el siguiente artículo encontrarás cómo solucionar las discusiones de pareja.

En definitiva, la indiferencia asertiva en dinámicas conflictivas no permite al interlocutor comprender lo que ocurre en la mente de la otra persona y, al no poder acceder a su esfera emocional, el manipulador o manipuladora no podrá identificar sus puntos débiles. Hacer uso de la indiferencia asertiva significa poder escoger qué batallas luchar y evaluar cuándo es mejor callar y cuándo es mejor reaccionar.

Este artículo es meramente informativo, en Psicología-Online no tenemos facultad para hacer un diagnóstico ni recomendar un tratamiento. Te invitamos a acudir a un psicólogo para que trate tu caso en particular.

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