Cómo no enamorarse de alguien tan rápido

Cada historia es diferente, de hecho, te animamos a que hagas un ejercicio de introspección para profundizar en cuáles crees que son las razones por las que te ocurre esto. A continuación, enumeramos cinco situaciones posibles:

1. Personas enamoradas del amor

Existe el riesgo de convertir el enamoramiento en una filosofía de vida gracias al aliciente de la ilusión que aporta, las mariposas en el estómago y esa intensidad con la que se vive el presente. Algunas personas viven anhelando eternamente este tipo de sensaciones.

2. No aprender de la experiencia

Algunas personas observan cómo viven una historia que tiene un esquema similar en distintos momentos con diferentes protagonistas. El amor no solo es sentimiento, también es reflexión. Y después de un desengaño amoroso conviene meditar en torno a lo ocurrido para poder extraer algunas conclusiones sobre lecciones vitales que pueden ponerse en práctica a partir de entonces. Sin embargo, cuando una persona evita esta fase de reflexión, prolonga los errores previos en el presente.

3. Miedo a la soledad

Cuando una persona teme la soledad presente o futura, rebaja sus propias expectativas sentimentales. Magnifica los detalles de interés que observa en la otra persona y expresa promesas de amor de manera anticipada. Aquellas personas que unen el concepto de felicidad con la vida en pareja pueden ser más vulnerables ante el riesgo de enamorarse rápido.

4. Baja autoestima

Cuando una persona se quiere poco a sí misma busca en alguien externo la felicidad. Desea reafirmar su propio valor al sentirse atractiva para alguien. Y confunde la atracción y el gustar con el amor en sí mismo. Esta baja autoestima propicia los vínculos de dependencia emocional.

5. Falta de amigos verdaderos

El ser humano es social por naturaleza, necesita de este entorno de pertenencia para desarrollarse plenamente a nivel emocional. Los vínculos de amistad aportan emociones y felicidad. Sin embargo, existe un tipo de soledad que es aquel que está condicionada por la ausencia de vínculos de referencia. Cuando una persona se siente sola es más vulnerable ante el riesgo enamorarse rápido al confundir el cariño con el enamoramiento.

1. No te centres únicamente en esa persona. Tu vida no cambia por completo por el hecho de haberle conocido. Sigue disfrutando de las mismas rutinas de siempre. Es decir, no dejes a tus amigos en un segundo plano por mucho que te apetezca quedar constantemente con ese alguien especial. Intenta tomarte esa historia con calma para darte tiempo de conocerle mejor y saber qué quieres.
2. Cuidado con las comedias románticas. Este tipo de cine puede ser entretenido. Sin embargo, conviene potenciar la reflexión crítica en torno a estas historias con final feliz para diferenciar entre la trama de la gran pantalla y la propia vida. El cine romántico es previsible con flechazos inmediatos y la eternidad de un amor que alimenta el tópico de las almas gemelas y el destino.
3. Defiende tu propio espacio como un valor. Esta autonomía y esta independencia te ayudan a adoptar un estilo de vida en el que tú eres protagonista desde una visión de empoderamiento. A su vez, al tener tu propio espacio, también adquieres mayor distancia emocional para reflexionar sobre la evolución de los acontecimientos.
4. Utiliza el poder de tu razón. El impulso de la emoción puede ser muy intenso, sin embargo, tan importante como el corazón es la propia lógica de la razón. Escucha con más frecuencia tu voz interior. Para ello, no solo observes las palabras que te dice la otra persona, sino también cuáles son sus actos. Además, ten presente que aunque creas conocerle de verdad, en realidad, no es así. Solo es posible querer a alguien de verdad cuando sabes quién es. Y este conocimiento requiere de tiempo.
5. Aprende de la experiencia de otras personas. Con mucha frecuencia ocurre que alguien observa con objetividad lo negativo de enamorarse rápidamente cuando ve este ejemplo en alguien externo, sin embargo, es víctima de la subjetividad de su propia emoción cuando es protagonista del proceso. Intenta escuchar los consejos de las personas que te aprecian.

El riesgo de enamorarte muy pronto de otra persona es que, cuando actúas de este modo, es posible que estés buscando que ese alguien cubra tus vacíos internos. Nadie decide el 100% cuándo ni de quién se enamora, sin embargo, enamorarse demasiado rápido en más de una ocasión puede ser una señal de inseguridad y problemas de apego.

Invierte en amor propio para mejorar tu vida

El mejor modo de enamorarte de otra persona es siendo consciente, previamente, de cuál es tu valor. Para ello, toma decisiones que te ayuden a mejorar tu propia vida: estudia, aprende idiomas, lucha por superarte a ti mismo, disfruta del presente, comparte tiempo con tu familia, fomenta el contacto con la naturaleza, haz cosas que te gusten y aprecia el valor de lo sencillo en el día a día. La felicidad no solo puede estar en la ilusión del estado de enamoramiento, sino también en la serenidad de observar un paisaje bonito.

Si después de haber conocido a alguien sientes que es el amor de tu vida y esto es algo que te ocurre de forma frecuente, una terapia psicológica puede ayudarte a identificar la causa por la que vives cada historia desde la idealización.

Este artículo es meramente informativo, en Psicología-Online no tenemos facultad para hacer un diagnóstico ni recomendar un tratamiento. Te invitamos a acudir a un psicólogo para que trate tu caso en particular.

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