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¿Es bueno vengarse de alguien?

¿Es bueno vengarse de alguien?

Algunas personas dudan de si es bueno vengarse de alguien. Una persona les ha hecho daño y una parte de ellos se ha planteado la posibilidad de vengarse. Pero, tras esa primera respuesta de defensa, han valorado si va a merecer la pena realmente adoptar esta conducta vengativa sobre el agresor.

Desde Psicología-Online hemos elaborado un artículo para ayudarte a responder si es bueno vengarse de alguien y hablar sobre este asunto: qué es la venganza, si sirve de algo, cuáles son sus consecuencias y sobre la importancia de aprender a perdonar.

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Qué es la venganza según la psicología

La venganza constituye una serie de actitudes y conductas llevadas a cabo por una persona o grupo con la intención de hacer daño a otra persona o grupo percibida como responsable del malestar vivido por una tercera persona o, en muchas ocasiones, uno mismo.

La persona vengativa ha responsabilizado a alguien de alguna situación e, independientemente de la certeza de esto, ha decidido dañar a esta persona por las consecuencias de sus actos. Esta actitud vengativa surge en personas que actúan fácilmente a través del rencor y la acumulación de este les lleva a actuar de esta manera o bien son personas que han sido muy dañadas (directa o indirectamente) con las consecuencias generadas por esa situación.

¿Vengarse sirve de algo?

Para considerar si vengarse sirve o no de algo vamos a considerar varias premisas:

  • El ser humano es bueno por naturaleza y, cuando actúa a través de una conducta malintencionada, es porque está herido y, por tanto, actúa de manera irracional e irresponsable.
  • Algunas disciplinas psicológicas o espirituales afirman que las consecuencias de tus conductas vuelven a uno mismo como un boomerang.
  • En tanto que el hombre es bueno por naturaleza, provocar mal en los demás va en contra de nuestra naturaleza y, por tanto, acaba haciéndonos daño igualmente a nosotros mismos.
  • Si adoptamos una actitud empática, podremos percibir las consecuencias de nuestra conducta vengativa, que va a generar un gran dolor en una o más personas. En realidad, el mismo dolor que nosotros hemos vivido.
  • Vengarse puede provocar un efecto en cadena de propagación de la actitud vengativa o hiriente: nosotros nos vengamos sobre los que nos han herido y estos pueden vengarse de nosotros o, sencillamente, descargar su dolor y malestar sobre terceras personas inocentes.

Existen dos creencias irracionales falsas con respecto a la venganza:

  1. Sirve para que la persona responsable del dolor tome conciencia de sus actos. Si bien esto puede darse, es un método dañino para favorecer esta toma de conciencia
  2. Interiormente, el individuo vengativo siente que, de este modo, sanará la herida (propia o de seres queridos) pero esto no es cierto, ya que la venganza es una acto cruel que en ningún modo permite el verdadero consuelo interior.

Si consideramos estas premisas, evidentemente no resulta nada útil vengarse. En realidad, la venganza multiplica nuestro dolor en vez de amainarlo. Lo multiplica en otras personas y, por supuesto, también en nosotros mismos. Las actitudes vengativas no nos van a permitir vivir en paz.

Consecuencias de la venganza

Por lo comentado hasta ahora, podemos preveer que las consecuencias de la venganza son, más bien, negativas y poco deseables. En realidad, no existe ninguna consecuencia positiva resultado de esta acción. Ni tan siquiera el aparente sosiego que aporta la llamada "dulce venganza" es recomendable, ya que basa el bienestar personal en el malestar ajeno, confundiendo el concepto de venganza con el de justicia. Algunas de las consecuencias negativas de actuar de manera vengativa son:

  • Herimos a una o más persona intencionadamente.
  • Podemos iniciar un cadena de eventos negativos, agresivos y destructivos: es posible que la persona víctima de nuestra venganza descargue su malestar de nuevo en otra situación o persona, propagando y aumentando las situaciones negativas y el malestar.
  • La satisfacción personal que aporta la "dulce venganza" es superficial y no aporta un sosiego real.
  • En los casos en los que la víctima inicial no somos nosotros mismos, es posible que esta venganza aporte más dolor que bienestar a esa persona.
  • Podemos sentirnos realmente afligidos tras haber emitido la conducta vengativa.
  • Esta conducta, en realidad, no restablece la situación original ni aporta ninguna solución alternativa al problema ocasionado.

Aprender a perdonar

Aprender a perdonar es un acto grandioso que presupone una gran humildad, compasión y benevolencia hacia el agresor. Se trata de una acción difícil que no se da de manera inmediata sino que requiere de un proceso de elaboración cognitiva y afectiva previo. Este proceso se da a través del transito entre las siguientes fases:

  • Analizar y reconocer el daño sufrido, aceptando y vivenciando nuestro dolor.
  • Valorar las ventajas reales del perdón sobre otras formas de respuesta ante el dolor, entre ellas la venganza: consuelo real, paz interior, ayudar al agresor a tomar conciencia inmediata de su error, etc.
  • Perdonar a la persona que ha provocado el dolor, bien directamente bien mediante una visualización que presenta los mismos efectos positivos en la víctima y el agresor.

La palabra "venganza", como tal, suena muy fuerte y solemos asociarla a actos malintencionados, graves y fuertes que una persona emite sobre otra que le ha provocado un agravio. Sin embargo, si miramos más detenidamente, muchos de nuestros actos cotidianos aparentemente "inofensivos" llegan a ser vengativos y, por tanto, hirientes y generadores de todas las consecuencias negativas que hemos nombrado previamente: no mirar a la cara; no hablar; hablar despectivamente; provocar una situación conflictiva proponiendo un tema delicado para la persona que nos ha ofendido; abandonar el lugar en donde está esta persona; etc. Son actos vengativos basado en el rencor sentido ante el dolor sufrido.

Nuestra sociedad alimenta de diferentes maneras la desconfianza, la venganza, el rencor, etc. a través de películas, programas de TV, etc. El perdón, por esto mismo, supone una gran hazaña. Supone trascender todos estos mensajes recibidos diariamente y, amparados por una gran fortaleza interior, elegir la respuesta del perdón. Las consecuencias de actuar de esta manera son totalmente fructíferas para la misma persona, para el agresor y para sus entornos como ejemplo de conductas que, al contrario de la destrucción que genera la venganza, crea y construye nuevos caminos. En este artículo damos 18 consejos para aprender a perdonar.

Este artículo es meramente informativo, en Psicología-Online no tenemos facultad para hacer un diagnóstico ni recomendar un tratamiento. Te invitamos a acudir a un psicólogo para que trate tu caso en particular.

Si deseas leer más artículos parecidos a ¿Es bueno vengarse de alguien?, te recomendamos que entres en nuestra categoría de Crecimiento personal y autoayuda.

Bibliografía
  • Vega, I.M. (2012) Vivir en tiempos de crisis. Ebooks Patagonia.
  • García Higuera, J.A. (2010). Perdonar y pedir perdón.
  • Delgado Suárez, J. ¿Por qué la venganza es dulce?

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4 comentarios
Su valoración:
Juan
Discrepo con lo que se dice sobre que la venganza no da satisfacción: incorrecto, sí la da, sobre todo cuando esa persona sabe que te ha hecho mal. Que tú se la devuelvas hace que beba de su propia medicina. Vale que te pones a su altura ¿y qué? Lo primero es tu bienestar, y saber que quien te dañó está sufriendo porque tú se la devuelves es muy satisfactorio.

Dejémonos de musiquitas celestiales tales como, "la mejor venganza es el olvido", "Perdona y sigue adelante" ... No hay nada como devolver un daño que te han hecho. Ten por seguro que a partir de ahí esa persona se pensará de volverte a dañar.
Su valoración:
Carlos Ilya
Me parece bien su análisis, pero creo que es demasiado optimista, y esto le quita la objetividad, hacen parecer que los problemas son pequeños y siempre tienen solución, están generalizando algo tan complejo como la causa que llevó a una persona a la venganza, lo hacen parecer tan simple y al hacerlo parecer así también dan a entender que el perdón es algo que cualquiera que haya sufrido puede alcanzar, algo que en mi opinión es incorrecto.

Te pongo un ejemplo: una persona sufre el secuestro y homicidio de un hijo, ¿Cómo una persona podría perdonar al sujeto que le causó tanto sufrimiento?

Aunque me parece un buen análisis, pienso que deberían recalcar que solo podría aplicar con casos donde el agravio no es muy grave.

Te recomiendo una serie de anime que se llama "Jigoku Shojo" que nos da mucho que reflexionar sobre la venganza. Se trata de una muchacha "sobrenatural" que se le ayuda a personas a vengarse de los que os hicieron sufrir, enviándolos al infierno a cambio de que una vez muerta la persona que solicitó la venganza su alma irá al infierno también. Esta serie nos muestran muchos ejemplos donde el perdón no es viable, te pongo un ejemplo: en un caso una niña es secuestrada, violada, asesinada por un hombre que esconde el cadáver, nunca encuentran a la niña, ni al culpable, y la historia se centra en la hermana mayor, de como vive el proceso de destrucción de su familia mientras busca a la hermana, y se debate en enviar al culpable al infierno aun sin conocerlo, ¿Cómo puedes perdonar cuando no sabes lo que ocurrió realmente ni el culpable y el proceso del perdón dicta que debes aceptar lo ocurrido?
Sara Sanchis
Buenas tardes Carlos,
Personalmente, y aunque soy consciente de la grandísima dificultad del proceso especialmente en determinadas ocasiones como las que nos comentas, estoy convencida de que el perdón devuelve la paz al alma y que merece la pena esforzarse por conseguirlo.
Gran abrazo,
Sara s.
Su valoración:
Charlie
Pues yo me pienso vengar desde hace años de alguien. Y lo haré, y seré firme y le haré pagar con creces. Y me quedaré muy a gusto, como cuando aplastas un mosquito.
Sara Sanchis
Buenas tardes Charlie,

No sé cuál es el motivo de tu necesidad de vengarte de esa persona pero te aseguro que, si lo llevas a cabo, una parte de tu corazón se romperá...
Si consigues perdonar a esta persona y, con una mirada misericordiosa, ver que ella hizo lo que pudo según el estado psicológico/anímico en el que se encontraba, que no lo hubiese hecho de estar totalmente en paz consigo mismo, si con sigues adoptar esta mirada hacia esta persona, un gran sosiego y liberación reinará en tu interior.

Un abrazo grandísimo.
Su valoración:
Marisol
En pleno cuarentena mi pareja y yo nos fuimos. Vivir cada uno.con nuestros padres, con la promesa de volver a vivir juntos pasada la cuarentena.
Tuvimos algunos problemas en el camino, discutimos ayer y el me terminó por teléfono..estoy destrozada y no sé qué hacer...me.siento en schok... simplemente dijo ya no te amo y no volveré a tu lado, q hago, estoy muy mal
Sara Sanchis
Querida Marisol,

Lamento el malestar que debes estar viviendo.

¿Por qué decidisteis volver con vuestros padres en la cuarentena?¿Es posible que ya se diese alguna situación de desencuentro que se ha evidenciado de manera clara ante la decisión de tu pareja de dejarlo?

En realidad, estas situaciones no son sencillas y no existe un consejo único que pueda valer de manera generalizada. Depende de muchos factores la orientación que te pueda ayudar a encontrarte mejor (cómo era vuestra relación, cómo eres tú, cómo es él, que deseabais cada uno de vuestra relación y del resto de ámbitos de vuestra vidas,...).

Si no te encuentras bien y necesitas ayuda y refuerzo emocional te animo a que busques ayuda profesional. Te puede ayudar muchísimo a vivir este proceso de duelo, a aceptar la situación y retomar fuerzas para seguir adelante.

Te animo a que te cuides y pides toda la ayuda que necesites y más...

¡Un fuerte abrazo!
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