¿La depresión es hereditaria?
La predisposición genética a la depresión puede transmitirse, pero hay factores ambientales y experiencias de vida que también influyen en su desarrollo, por lo que no es puramente hereditaria. En si, la relación entre la depresión y la genética ha sido un tema de creciente interés y estudio en la comunidad científica.
Si bien es cierto que la depresión puede tener un componente hereditario, su naturaleza es multifacética y compleja. Entender este trastorno como una interacción dinámica entre la herencia genética y los factores ambientales es fundamental para abordar su prevención y tratamiento de manera integral. En este artículo de Psicología-Online, te brindaremos información acerca de si la depresión es hereditaria.
¿La depresión es hereditaria o adquirida?
La depresión puede tener una base genética, lo que significa que ciertas personas pueden heredar una predisposición a desarrollarla. Sin embargo, también puede ser adquirida a través de experiencias de vida, como el estrés crónico, traumas, pérdidas significativas o condiciones ambientales desfavorables.
En este sentido, no existen datos contundentes acerca de la transmisión genética de este cuadro clínico por parte de los progenitores, por lo que la depresión no es hereditaria. Más bien, la interacción entre factores genéticos y ambientales juega un papel crucial en el desarrollo de la depresión, lo que hace que sea una condición compleja y multifacética, y su desarrollo puede variar de una persona a otra.
Si te preocupa tener depresión, ya sea por antecedentes familiares u otras razones, comunícate con un profesional lo antes posible.
¿En qué porcentaje se hereda la depresión?
No hay un porcentaje definitivo que indique en qué medida se hereda la depresión, ya que la influencia genética puede variar considerablemente entre las personas y las familias. Sin embargo, según los estudios más recientes[1], se estima que hay alrededor un de un 40% a 50% de probabilidades de que una persona herede un trastorno depresivo, aunque esto puede variar en función de las poblaciones estudiadas.
Esto indica que las personas con antecedentes familiares de depresión tienen un riesgo ligeramente mayor de desarrollarla. Aun así, hay que tener en cuenta que la genética no es el único factor determinante; las experiencias de vida y los factores ambientales también tienen un papel significativo en la manifestación de la depresión. También ten en cuenta que puede manifestarse de diferentes maneras. En este artículo te mostramos los diferentes Tipos de depresión: síntomas y tratamiento.
Qué personas son más propensas a tener depresión
La depresión puede afectar a personas de todas las edades, géneros, razas y clases socioeconómicas. Sin embargo, hay ciertos factores que pueden aumentar el riesgo de desarrollar depresión. Estos incluyen:
- Experiencias traumáticas: las situaciones dolorosas que no se han superado pueden generar una mayor cantidad de síntomas. Ejemplos de este estilo son la muerte de seres queridos, pérdidas laborales, desilusiones amorosas, abusos sufridos durante la infancia, entre otros.
- Factores ambientales: experiencias traumáticas, estrés crónico, pérdidas significativas, abuso emocional o físico, pueden desencadenar la depresión en algunas personas.
- Factores bioquímicos: desequilibrios en ciertas sustancias químicas cerebrales, como la serotonina y la noradrenalina, pueden contribuir a la depresión.
- Factores psicológicos: personalidad, baja autoestima, perfeccionismo excesivo y ciertos patrones de pensamiento negativo pueden contribuir a la depresión.
- Factores sociales: aislamiento social, falta de apoyo social, conflictos interpersonales, discriminación o dificultades económicas pueden contribuir a la depresión. Para evitarlo, aquí te explicamos Cómo mantener buenas relaciones interpersonales.
- Condiciones de salud física: algunas enfermedades crónicas, como enfermedades cardíacas, diabetes, cáncer o enfermedades autoinmunes, pueden aumentar el riesgo de padecer depresión.
¿La depresión hereditaria tiene cura?
La depresión hereditaria, como cualquier forma de depresión, es una condición médica que puede tratarse y gestionarse, pero no tiene una «cura» definitiva en el sentido de que no desaparece de forma permanente. Sin embargo, existen abordajes clínicos que han demostrado ser muy eficaces para mejorar la calidad de vida de las personas que lo padecen.
El tratamiento para la depresión hereditaria generalmente incluye una combinación de terapia psicológica (como la terapia cognitivo-conductual o la terapia interpersonal) y, en algunos casos, medicación antidepresiva. Ante todo, es imprescindible que el consumo de medicación psiquiátrica esté regulado por un especialista que realice un seguimiento preciso del caso.
Además, adoptar un estilo de vida saludable que incluya ejercicio regular, una dieta balanceada, suficiente descanso y apoyo social también puede ser beneficioso para salir de una depresión profunda.
Este artículo es meramente informativo, en Psicología-Online no tenemos facultad para hacer un diagnóstico ni recomendar un tratamiento. Te invitamos a acudir a un psicólogo para que trate tu caso en particular.
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- Botto, A., Acuña, J., Jiménez, J.P. (2014). La depresión como un diagnóstico complejo. Implicancias para el desarrollo de recomendaciones clínicas. Revista de Medicina de Chile, 10 (142), 1297-1305.
- Asociación Estadounidense de Psiquiatría (2013). Manual Diagnóstico y Estadístico de los trastornos mentales (5.ª edición). Arlington: Editorial Médica Panamericana.
