Nunca me apetece hacer el amor, ¿por qué?
Hay momentos en la vida en los que puedes estar más o menos activo sexualmente. Es decir, hay periodos en los que puedes tener la libido más alta y otros en los que apenas tengas ganas de tener relaciones sexuales. Esto es algo normal y corriente que nos sucede a todos. Sin embargo, puede ocurrir que lleves bastante tiempo sintiendo que no tienes apetencia sexual y que, por mucho que te fuerces, no te nace el deseo ni las ganas de estar con tu pareja.
En estos casos, es importante que reflexionemos un poco acerca de nuestro presente para que, así, podamos hacer los cambios pertinentes y disfrutar plenamente de la vida sexual. En este artículo de Psicología-Online vamos a responder a tu pregunta de "¿Por qué nunca te apetece hacer el amor?", por ello, te descubriremos las causas más comunes pero, también, las soluciones que se pueden llevar a cabo.
Causas por las que nunca te apetece hacer el amor
Para poder entender por qué nunca te apetece hacer el amor es importante que nos detengamos en las causas más comunes de esta falta de apetito. Tienes que saber que pueden ser motivos de origen psicológico así como motivos puramente físicos, por tanto, es esencial intentar comprender cuál es la causa y, así, podremos tratar el problema de raíz. Las causas más comunes son las siguientes.
Problemas en la pareja
Es una de las causas más comunes de que haya problemas en la cama. Y es que puede ser que, últimamente, estéis pasando una mala época, estéis más distanciados o no os reservéis noches para estar y disfrutar juntos. Además, si llevas mucho tiempo con tu pareja, puede ser que también estéis aburridos de la rutina y la monotonía sexual. Por todo ello, es esencial que, antes que nada, evalúes tu relación de pareja para ver si ahí es donde está el problema.
Estrés y ansiedad
Es uno de los motivos más frecuentes que pueden hacer que una persona no tenga ganas de hacer el amor con su pareja. De hecho, vivir con unos niveles muy elevados de estrés puede afectar muchísimo a tu día a día: te afectará en el humor, en el sueño, en la energía, en el hambre, etcétera. Un sistema nervioso alterado puede alterar todo tu biorritmo y, por supuesto, afectar a tu deseo sexual. En este otro artículo te descubrimos los efectos del estrés en el cuerpo para que seas consciente de lo mucho que te puede llegar a afectar.
Abuso de alcohol y/o drogas
Si durante tu vida has abusado de sustancias tóxicas como el alcohol y las drogas, es normal que tu libido sexual se vea alterada. Para disfrutar de una salud sexual plena y satisfactoria se recomienda apostar por hábitos de vida saludables como comer bien, hacer deporte y vivir sin estrés. Todos estos factores te ayudarán a sentirte mejor y, por tanto, a que tu sexualidad se despierte. No olvidemos que las drogas son altamente depresivas y, por tanto, producen un efecto muy nocivo para tu salud tanto sexual como tu salud en general.
Experiencias sexuales traumáticas
Muchas veces, una persona no siente deseo sexual porque no ha vivido buenas experiencias en la cama. Puede ser que haya sufrido abusos o malos tratos o, simplemente, que haya tenido experiencias sexuales poco satisfactorias o con las que no acabara de sentirse 100% cómodo. En estos casos, suele ser recomendable el acudir a una terapia psicológica que nos ayude a sanar esta mala experiencia. También, puedes ayudarte de una pareja con la que sientas complicidad y confianza para ir probándote en la cama.
Trastorno del Deseo Sexual Hipoactivo (TDSH)
El Trastorno del Deseo Sexual Hipoactivo es un trastorno que afecta al deseo sexual y se da tanto en mujeres como en hombres. Se trata de un trastorno psicológico que puede llegar a afectar profundamente la vida de la persona que lo padece. Es decir, para ser diagnosticado de este trastorno no solo basta con que no tengas ganas de hacer el amor sino que, también, que este trastorno te esté afectando a nivel anímico y psicológico. Si tú te sientes bien y tranquilo sin tener sexo, entonces no padeces TDSH.
Problemas de salud
Otra de las posibles causas por las que nunca te apetece hacer el amor deben buscarse en padecer enfermedades que afecten a nuestra libido. Las que más pueden alterar el apetito sexual son:
- Alteraciones de la tiroides
- Padecer diabetes
- Enfermedades relacionadas con la salud cardiovascular
- ETS (Enfermedades de Transmisión Sexual)
- Cáncer
También se debe tener en cuenta la edad de la persona en cuestión. Las mujeres que superan los 45 años pueden ver disminuir su libido por el estado de pre-menopausia en el que se encuentran. En este otro artículo te descubrimos los síntomas emocionales de la menopausia.
¿Qué hago si no me apetece tener relaciones sexuales?
Ahora que ya sabes por qué nunca te apetece hacer el amor, es importante que empieces a poner remedio a esta situación. Sobre todo, en el caso de que estés en una relación, resultará esencial que intentes mejorar esta falta de apetito porque puede afectar, muchísimo, a la pareja. Ten en cuenta que la relación más pasional, el contacto más íntimo y la conexión más salvaje forma parte de la cama, sin ello, al final vuestra relación será más parecida a una relación de familia o amigos que de pareja. Y eso es algo que se debe evitar.
Eso sí: tienes que tener en cuenta que nadie puede estar siempre al 100%. Hay momentos en nuestra vida en los que podemos sentirnos con menos deseo sexual. Pero, si esta situación se alarga, es importante que tomes cartas en el asunto y no lo dejes pasar. Es un asunto muy importante que se debe resolver cuanto antes mejor para evitar que se enquiste.
Aquí te daremos algunos consejos para que puedas recuperar las ganas de tener relaciones sexuales:
- Mastúrbate: es uno de los primeros consejos para poder activar tu libido. Tienes que reservarte momentos para ti, para tu intimidad y para tu puro placer. De esta forma, conseguirás reactivar tu apetito sexual y que, poco a poco, la libido se vaya disparando de forma más habitual. Por tanto, trátalo como un tratamiento, y mastúrbate 3 veces a la semana. Con esta sencilla práctica conseguirás reservar un momento del día para ti, para tu disfrute y que tu cuerpo vuelva a sentir las ganas de tener sexo.
- Pasa más tiempo con tu pareja: muchas veces, los problemas sexuales de la pareja no vienen solo por causa de uno sino que, en la gran mayoría de las veces, ocurre porque entre los dos ha sucedido algo. Puede ser que hayáis pasado una mala racha, que estéis distanciados, etcétera, por eso, es importante reconectar con tu pareja y vivir noches románticas e íntimas. Así, conseguiréis estrechar los lazos de intimidad y podréis activar vuestra libido.
- Evita la rutina: uno de los principales motivos por los que desaparecen las ganas de hacer el amor con la pareja es que, cada encuentro sexual, sea igual que el anterior. El sexo es pasión, conexión, entusiasmo y, por eso, se debe evitar repetir patrones y hacer que sea algo monótono. Es por este motivo que es altamente recomendable atreverte a probar cosas nuevas con tu pareja: juegos sexuales, juguetes, tener sexo en diferentes espacios... Háblalo con tu pareja y, así, cada vez será uno de los dos el que tendrá que venir con una idea nueva muy picante y muy divertida.
- Habla con tu pareja: y, por último, queremos remarcar la necesidad de hablar y comunicarte con tu pareja. Si tenéis problemas en la cama, el problema es cosa de dos y, por tanto, sois los dos los que tenéis que intentar resolverlo. No dejéis pasar este tema y darle la importancia que tiene ¡porque es mucha!
Este artículo es meramente informativo, en Psicología-Online no tenemos facultad para hacer un diagnóstico ni recomendar un tratamiento. Te invitamos a acudir a un psicólogo para que trate tu caso en particular.
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