Qué es una persona intransigente y cómo tratarla

Intransigencia significa respetar los límites prefijados. Concretamente, la definición de intransigente en el diccionario es un adjetivo que se utiliza para calificar un carácter o un temperamento que no transige o que no indulta, pero se puede definir a una persona como intransigente.

Cuando hablamos de una persona intransigente, nos referimos a alguien que no está dispuesto/a a cambiar su posición para llegar a un acuerdo o para cerrar un debate, es decir, no acepta que otro individuo pueda tener razón y no reconoce que los argumentos del otro puedan ser válidos.

En el lenguaje coloquial, ser una persona transigente es aferrarse rigurosamente a una regla, un valor o una tradición, sin tolerar desviaciones de ese parámetro o excusas que justifiquen una violación de tales principios. A continuación, te mostramos con detalle cuáles son las principales características de una persona intransigente:

• Consume nuestras energías cuando tratamos de explicar algo: no respeta nuestras posiciones y es difícil instaurar un diálogo mutuamente interesante.
• Desconfía de los demás: debido a que es egocéntrico/a y muy activo/a, casi frenético. En este artículo encontrarás información sobre las características de las personas egocéntricas y cómo tratarlas.
• Persigue sus ideas hasta el final.
• Finge escuchar al interlocutor, pero es impermeable a cualquier otra consideración.
• Detesta que le molesten.
• Se enorgullece y se complace de sus ideas, especialmente si son a contracorriente o si suscitan perplejidad en los demás.
• Confunde el ser "sobre las líneas" con la originalidad: no tiene en cuenta que lo que dice puede estar fuera de lugar y fuera de tiempo.

Si quieres entender mejor que es ser una persona intransigente, a continuación, verás algunos ejemplos de intransigencia:

• Acepción negativa: quiere decir ser intratable e inmutable. A veces, la gente se enfada y pasa a la violencia. A su modo, esto puede ser un caso raro de intransigencia, ya que la chispa que ha causado este comportamiento violento se encuentra en la infracción de un vínculo o límite que, una vez superado, hace caer todas las prohibiciones.
• Acepción positiva: ser intransigente significa dar prioridad a respetar ciertas reglas. Por ejemplo, un cirujano que se niega a usar el bisturí que cayó al suelo accidentalmente de las manos del nuevo asistente. Si el cirujano no mantiene su conducta profesional, es decir, seguir las normas de esterilización y todos los protocolos seguidos y derivados de estudios científicos, las consecuencias pueden ser terribles para el paciente operado.

Si te preguntas cómo lidiar con una persona intransigente, lo primero que debes hacer es no huir de la situación y no hacer uso de la crítica. En vez de reconocer la poca bondad y calidad de las intenciones de la persona intransigente, es mejor trabajar tu autoestima y la consciencia que tienes de ti mismo/a. De este modo, podrás reafirmar tu comportamiento ante la intransigencia de alguien y estar tranquilo/a ante esta situación.

Además, para tratar a una persona intransigente también es importante aplicar las siguientes recomendaciones:

• Escuchar: entender lo que asusta, sus gustos y sus límites. Mostrarlos y no dejarse arrastrar cayendo víctima del oportunismo de los demás.
• Decir NO cuando se necesario: nunca renunciar a expresar un punto de vista propio.
• Reconsiderar seriamente la relación: si ves que te hace más mal que bien, es mejor considerar cómo distanciarse de esa persona. No tengas miedo a poner límites.

¿Las personas pueden cambiar? Si te has sentido identificado/a con las características expuestas anteriormente y quieres dejar de ser un persona intransigente, te recomendamos seguir las siguientes estrategias.

Reconocer tus propios límites

El bienestar psicofísico se logra gracias a la capacidad de ser indulgente con los demás. Para ayudar a una persona intransigente, hay que apoyarle para que reconozca y admita su propia intransigencia. En estos casos, el proceso a seguir es este:

1. Reconocer y admitir la propia intransigencia: ser consciente es el primer paso para alcanzar un equilibrio emocional que permite vivir más serenamente.
2. Aprender a perdonarse: reconocer los propios méritos y aprender a disfrutar de los placeres de la vida. En este artículo, te contamos cómo perdonarse a uno mismo.
3. Cambiar los hábitos no es fácil, pero se puede probar.

Ejercicios para dejar de ser intransigente

Ser una persona intransigente no significa que no puedas dejar de serlo. Hay diferentes ejercicios que te pueden ayudar a ser más tolerante, menos exigente y más flexible. Veamos cuáles:

• Escribe un diario: anota cada día al menos cinco cosas por las que hemos sido buenos, y otras tantas que no te han gustado.
• Dedica media hora al día a actividades agradables y no que tengan necesariamente un fin.
• Observa las pequeñas diferencias entre nosotros y los demás: si eres muy intransigentes, identificarás a los amigos o familiares que no lo son. Aprender a ver que entre tú y ellos/as pueden posturas distintas de las que se puede aprender.

Este artículo es meramente informativo, en Psicología-Online no tenemos facultad para hacer un diagnóstico ni recomendar un tratamiento. Te invitamos a acudir a un psicólogo para que trate tu caso en particular.

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