Síndrome de Rebeca: qué es, síntomas, causas y tratamiento

El síndrome de Rebeca, también conocido como celos retrospectivos o retroactivos, puede definirse como la manifestación patológica de celos e inseguridad hacia la expareja o una persona con laque se haya entablado una relación romántica. Si bien este síndrome no se encuentra dentro de los grupos que propone el DSM-V^[1], también podría ser descrito como un trastorno mental delirante celotípico debido a sus características.

A continuación, te mostramos los criterios diagnósticos del síndrome de Rebeca:

• Ideas delirantes respecto a infidelidades.
• Deterioro de las relaciones laborales, sociales y familiares a razón de estas ideas.
• Duración de un mes o superior.
• La distorsión de la percepción de la realidad no puede ser explicada a partir de la presencia de otro trastorno mental ni de la ingesta de sustancias tóxicas y/o medicamentos.

¿Cómo saber si tengo el sindrome de Rebeca? Con el fin de comprender mejor este trastorno y establecer el tratamiento más adecuado, es importante tener en cuenta las manifestaciones que se producen en estos casos tanto a nivel físico y emocional como conductual. Seguidamente, te mostramos los principales síntomas del síndrome de Rebeca:

• Ideas recurrentes sobre infidelidades de la pareja actual con su expareja.
• Pensamientos catastróficos acerca de la vida.
• Angustia.
• Miedo a la soledad.
• Baja autoestima.
• Respiración entrecortada.
• Vínculos sociales inestables.
• Sudoración excesiva.
• Búsqueda persistente de evidencias que prueben las ideas de celos.
• Necesidad constante de aprobación de otras personas.
• Conductas persecutorias hacia la pareja.

No obstante, cabe destacar que la presencia de alguno de estos síntomas de forma aislada no representa necesariamente al síndrome de Rebeca. Por ello, el diagnóstico de los celos retrospectivos deberá ser llevado a cabo por un profesional de la salud mental que evalúe las condiciones clínicas de cada paciente de forma particular.

En el siguiente artículo encontrarás más información sobre los Tipos de celos: características y ejemplos.

El síndrome de Rebeca puede tener diversos orígenes que den lugar a los síntomas mencionados anteriormente. En este apartado abordaremos las causas más frecuentes de estos celos retrospectivos:

Factores ambientales

Generalmente, las personas que han vivido infidelidades en alguna de sus relaciones amorosas suelen temer que se repita la misma situación en sus vínculos futuros. Esto explicaría la inseguridad que manifiestan con respecto a la expareja de la persona amada.

Por otro lado, los sentimientos vinculados a los celos también pueden estar originados durante el período de la infancia a causa de haber vivido experiencias desagradables dentro del núcleo familiar. Las mismas dejan marcas que se toman como patrones de conducta a lo largo de la vida.

Factores genéticos

De igual modo, en estos casos también es importante tener en cuenta el rol de la herencia genética en las personas que manifiestan inseguridad permanente. Aquí entran en juego factores como, por ejemplo, el funcionamiento del sistema nervioso central o la tendencia al alcoholismo, entre otros.

¿Cómo superar el síndrome de Rebeca? A pesar de los obstáculos que puede ocasionar el síndrome de Rebeca, hoy en día disponemos de diversos abordajes que pueden proporcionar resultados satisfactorios para las personas con este cuadro clínico. Los tratamientos más recomendados para el síndrome de Rebeca son:

Terapia psicológica

La terapia es un espacio que invita a reflexionar sobre las acciones y el contexto de una persona. En primer lugar, podemos encontrar terapias de corta duración que se centran en buscar herramientas para afrontar situaciones de miedo, inseguridad y/o ansiedad de una forma más amena. En este sentido, la terapia cognitivo-conductual es uno de los abordajes más recomendados para tratar los celos retrospectivos.

Por otro lado, las terapias de larga duración intentan situar el origen de los conflictos de una persona mediante el recuerdo de situaciones infantiles. De esta forma, la persona puede adoptar por otras alternativas a la hora de vivir situaciones complejas. En este caso, la terapia de larga duración más efectiva es el psicoanálisis.

Medicación psiquiátrica

En casos de una gravedad que imposibilita el desarrollo de las actividades cotidianas de una persona, el suministro de ansiolíticos puede ser una opción viable. Estos medicamentos disminuyen la intensidad de los síntomas a partir de modificaciones producidas en la química del cerebro.

No obstante, es imprescindible la supervisión de un profesional de la salud mental idóneo antes de empezar este tratamiento.

Este artículo es meramente informativo, en Psicología-Online no tenemos facultad para hacer un diagnóstico ni recomendar un tratamiento. Te invitamos a acudir a un psicólogo para que trate tu caso en particular.

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