Cómo desconectar del trabajo

Lo primero que debe tenerse en cuenta reside en la necesidad de establecer límites concretos entre el trabajo y la casa. Más allá de que la labor pueda ser virtual o presencial, es importante apelar a algunas tácticas que ayuden:

• Crea rutinas precisas: llevar a cabo una rutina que implique una diferenciación de espacios resulta fundamental. En este sentido, deben situarse actividades que varíen en el trabajo y la casa. A modo de ejemplo, una persona puede cambiar su vestimenta para sentir que ya está fuera del horario laboral.
• Desconecta de aparatos tecnológicos: los dispositivos electrónicos son una fuente de sobrecarga para cualquier persona, ya que imponen determinados estímulos difíciles de evitar. Por ello, una de las variables que debe tomarse en consideración reside en quitar las notificaciones de emails, mensajes de texto, llamadas, entre otros. De este modo, las preocupaciones quedan en el trabajo.
• Realiza actividades de ocio personal: tener momentos de disfrute es trascendental para la vida cotidiana, ya que permite transitar el tiempo de un modo más relajado. Cuando se llega del trabajo a la casa, puede optarse por cocinar, mirar alguna película o serie, dibujar, entre otros.

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Cuando cae el sol, puede resurgir las preocupaciones del día. Sin embargo, esta condición implica ciertos inconvenientes que pueden afectar a la persona. Por ello, hablaremos sobre cómo desconectar del trabajo por la noche:

• Realiza rutinas específicas en la cama: antes de dormir, es importante practicar algún ejercicio que relaje la mente y el cuerpo. La meditación, el mindfulness y el yoga poseen rutinas que pueden adaptarse a cualquier persona, brindando una mejoría en la calidad del sueño.
• Apaga tus aparatos electrónicos: tanto el celular como las computadoras son fuente de distracción y nerviosismo, ya que activan el sistema nervioso central. Esto se hace evidente en la noche y puede interrumpir el descanso. Para evitar cualquier información relacionada al trabajo, es conveniente restringir el contacto con la virtualidad.
• Lee un libro: uno de los momentos que toma valor en la rutina de una persona es aquel que se le dedica a la lectura. Para ello, es pertinente leer libros, artículos o cualquier otro material que sea una distracción del trabajo.

Cuando llega el momento de descansar de todas las obligaciones semanales, puede ser difícil desatender cuestiones pendientes. No obstante, existen soluciones para tener días más reparadores. A continuación, describiremos cómo desconectar del trabajo en fin de semana:

• Realiza actividades por fuera de lugares habituales: dado que el fin de semana suele abarcar días con mayor rango de tiempo, es conveniente acudir a lugares que sean un escape de la rutina. De este modo, la persona se siente desconectada de todas las actividades que le recuerdan al trabajo. Ejemplos de esto son visitar amigos, concurrir a parques, ir al cine, entre otros.
• Socializa: hacer nuevos contactos es fundamental para vivir con una mayor apertura a lo nuevo que surja. De este modo, acudir a espacios sociales ayuda a distenderse del estrés semanal y puede mejorar el autoestima. Para ello, puede optarse por realizar deportes grupales, concurrir a discotecas, ir a grupos de debate, entre otros.

Tomarse un descanso del período laboral ayuda a recargar energías y retomar las actividades con otra perspectiva. Para que no existan problemas mayores es posible apelar a estrategias puntuales. En este apartado señalaremos cómo desconectar del trabajo en vacaciones:

• Usa la tecnología de forma inteligente: durante los períodos de descanso es normal grabar vídeos o sacar algunas fotografías para tener como recuerdo. Sin embargo, si quieres desconectar completamente del trabajo es importante evitar el uso constante de aparatos electrónicos para no generar una dependencia emocional. Una de las opciones más viables consiste en imponer horarios de uso del dispositivo móvil o desactivar las notificaciones.
• Evita las conversaciones acerca del trabajo: a pesar de estar de vacaciones, vale la pena limitar la temática del trabajo. De lo contrario, la persona puede revivir preocupaciones que produzcan malestar. Ante esto, es preferible apelar a conversaciones referidas a otras áreas de la vida.
• Imponte límites: si alguien quiere quiere ponerse en contacto contigo para hablar temas laborales que no son urgentes durante tus vacaciones es importante hacerle saber que este es un período para descansar. Por lo tanto, recuerda evitar responder mensajes telefónicos o dejar una respuesta automática cuando te encuentres fuera de la oficina o fuera de tus horas de trabajo.

Más allá de todos los recursos descritos en los párrafos anteriores, resulta esclarecedor comprender por qué es importante desconectar del trabajo. Te lo explicamos a continuación:

• Evita frustraciones mayores: las cargas laborales pueden ser difíciles de sobrellevar. Si no hay una desconexión laboral, existen riesgos de que la persona descargue frustraciones, malestares y angustias sobre su entorno.
• Mejora la salud mental: las preocupaciones suelen descender cuando se interrumpe el vínculo con el trabajo. Asimismo, la persona tiene mayor niveles de energía para desarrollar actividades de esparcimiento sin fatigarse. A su vez, la tolerancia a la frustración se incrementa notablemente.
• Previene problemas de salud física: el cuerpo puede verse afectado si la persona no desconecta del trabajo. Esto se refleja en la alimentación que lleve a cabo y la higiene de sueño que adopte. Más aún, se previenen enfermedades de gravedad.

Este artículo es meramente informativo, en Psicología-Online no tenemos facultad para hacer un diagnóstico ni recomendar un tratamiento. Te invitamos a acudir a un psicólogo para que trate tu caso en particular.

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