Ejercicios para cambiar las creencias limitantes

Las creencias limitantes son ideas o pensamientos negativos, que no tienen porque ser reales, pero que las personas los consideran como tal y bloquean la consecución de objetivos. Las creencias limitantes pueden afectar a un ámbito de la vida o a todos a la vez, ya que generan inseguridades. Dichas creencias pueden surgir a partir de un evento o comentario dañino hacia la persona que las sufre.

Reconocer y desafiar estas creencias es fundamental para el crecimiento personal y profesional. Al cuestionar su validez y reemplazarlas por creencias más positivas y empoderadoras, podrás liberarte de limitaciones autoimpuestas y abrirte a nuevas oportunidades y posibilidades.

Tipos de creencias limitantes y ejemplos

Se pueden distinguir diferentes tipos de creencias limitantes. Las vemos a continuación:

• Creencias de posibilidad: hacen referencia a la imposibilidad de conseguir algo concreto. Por ejemplo: “Mis compañeros seguro que acaban la carrera a tiempo, pero yo no voy a poder conseguirlo”.
• Creencias de capacidad: se centran en destacar las capacidades de los demás, infravalorando las propias. Por ejemplo: “Mi hermana es capaz de llevar el trabajo y su vida familiar a la vez, y yo soy incapaz de hacer bien únicamente mi trabajo”.
• Creencias de merecimiento: se basan en pensar que no merecemos los logros que vamos consiguiendo por el mero hecho de no sentir que se ha sacrificado lo suficiente. Por ejemplo: “No me merezco el ascenso porque no he trabajado suficiente este año”.
• Creencias sobre el cambio: creencias que nos hacen resistirnos al cambio o a nuevas oportunidades, como "El cambio siempre es malo" o "Prefiero quedarme en mi zona de confort".
• Creencias sobre el dinero: creencias relacionadas con la escasez o la dificultad para obtener o mantener el dinero, como "El dinero es la raíz de todos los problemas" o "No puedo permitirme tener más de lo básico".

Uno de los ejercicios para cambiar creencias limitantes consiste en realizar una respiración guiada a través de autoinstrucciones, es decir, indicaciones que nos vamos dando a nosotros mismos. A continuación, te mostramos cómo hacerlo:

1. Nos decimos que vamos a respirar lentamente cogiendo aire por la nariz durante 5 segundos.
2. Sentimos como pasa el aire a nuestra garganta y expulsamos en 7 segundos.
3. Cuando nos hayamos relajado podremos poner el foco de atención en nuestros pensamientos. En ese momento es cuando tenemos que reflexionar sobre qué tipo de pensamientos nos están limitando.
4. El hecho de poder identificar las creencias limitantes es el primer paso para trabajarlas.

Este segundo ejercicio para identificar las creencias limitantes se basa en anotarlas y pararnos en cada una de ellas para poder detectar que nos hacen sentir. Hay dos opciones diferentes para llevar a cabo el ejercicio:

1. Escribir todas las creencias limitantes y luego analizarlas una a una.
2. Analizar cada creencia que se va anotando, y trabajarlas una a una.

Ambas opciones son igual de válidas, ya que el fin último de este ejercicio es ser capaz de asociar una emoción a cada una de las creencias limitantes. Por ejemplo, asociar la creencia limitante “no soy capaz de conseguir un trabajo” con la frustración o la impotencia.

Si te cuesta identificar tus emociones, puedes consultar este artículo sobre los tipos de emociones y su significado.

Si te preguntas cómo cambiar las creencias limitantes, este ejercicio se centra en crear un pensamiento alternativo para cada una de las creencias limitantes. Por ejemplo, pasar de “no tengo capacidades suficientes para sacarme una carrera universitaria” (creencia limitante) a “seguro que si soy constante en los estudios conseguiré sacarme la carrera” (creencia alternativa).

Este ejercicio suele ser más complicado, ya que las personas que reúnen muchas creencias limitantes suelen tener poco desarrollada la flexibilidad mental. El objetivo final es que la persona aprenda a focalizar la atención en aspectos positivos.

El objetivo de principal de este ejercicio para cambiar las creencias limitantes es que la persona que asocia las emociones se percate de que al pensar mediante las creencias alternativas, las emociones que perciben son positivas y más gratificantes. Por ejemplo, asociar a “si trabajo duro, conseguiré comprarme el coche que necesito” con la satisfacción o el orgullo personal.

¿Cómo se pueden modificar las creencias limitantes? Se trata de dar el paso a hacer lo que nuestras creencias limitantes nos intentan bloquear, es decir, enfrentarnos a la situación que pensamos que no somos capaces y ocuparnos de ese sentimiento de incapacidad. El objetivo es demostrarnos a nosotros mismos que somos capaces y de que todo es posible con esfuerzo y práctica.

Este ejercicio para cambiar creencias limitantes suele llevarse a cabo en quinto lugar, puesto que, primero hay que trabajar en las creencias limitantes como tal y conseguir producir alternativas que nos faciliten la puesta en práctica.

Las creencias limitantes suelen estar relacionadas con las inseguridades y/o falta de autoestima. Por ello, es muy importante trabajar también las inseguridades. Esto puede hacerse a través de un ejercicio de identificación de capacidades, es decir, la persona tendría que hacer una tabla con tres columnas e ir apuntando en cada una de ellas las cualidades y capacidades que tiene, las cosas buenas que hace en su día a día y que éxitos o logros han conseguido hasta el momento.

Uno de los ejercicios para cambiar creencias limitantes fundamental para que la persona pueda tener una imagen visual de todas los aspectos positivos que le rodean en su vida diaria. Si necesitas otras herramientas para lograrlo, en este artículo, te contamos cómo superar la inseguridad.

Como se menciona en el apartado anterior, la autoestima es un factor que está directamente relacionado con la formación de creencias limitantes. Por tanto, uno de los ejercicios para cambiar las creencias limitantes más importantes se basa en crear un calendario de rutinas en el que se añadan actividades agradables y de interés que fomenten el ocio y la distracción de la persona. Las actividades a añadir pueden ser culturales, de ocio o relajantes, entre otras, pero sobre todo deben satisfacer a la persona.

En este artículo encontrarás otras técnicas y ejercicios para mejorar la autoestima.

Para terminar de trabajar las creencias limitantes, es importante realizar este ejercicio. Concretamente, se centra en las relaciones sociales y en el desarrollo de la comunicación con las personas que queremos y que más nos conocen.

Básicamente, consiste en mantener una conversación con las personas que más apreciamos para contrastar las creencias limitantes. Este ejercicio permite desmontar dichas creencias y generar creencias alternativas más adaptativas.

Las creencias limitantes pueden afectar negativamente al desarrollo de nuestra vida diaria. Si intentas trabajar dichas creencias sin éxito, y continúan causándote malestar y limitando el logro de objetivos, no dudes en acudir a un profesional de la psicología que pueda acompañarte en este proceso y darte las herramientas y estrategias necesarias para mejorar tu día a día.

Una vez que hayas identificado y empezado a cambiar tus creencias limitantes, es importante poner en práctica acciones que refuercen esas nuevas creencias. Por ejemplo, si estás trabajando en superar el miedo al fracaso, puedes comenzar a tomar pequeños riesgos y desafíos que antes evitarías.

Cada vez que te enfrentes a una situación desafiante y la superes, fortalecerás tu nueva creencia en tu capacidad para tener éxito. Además, es útil visualizarte alcanzando tus metas y actuando de acuerdo con tus nuevas creencias en situaciones futuras. La práctica consistente de comportamientos alineados con tus nuevas creencias contribuirá a reforzarlas y hacerlas más arraigadas en tu forma de pensar y actuar.

A veces, cambiar creencias limitantes puede resultar difícil de hacer solo/a. Buscar el apoyo de amigos, familiares o un terapeuta puede proporcionarte el aliento y la perspectiva externa que necesitas para superar tus obstáculos. Compartir tus metas de cambio con personas de confianza puede brindarte una red de apoyo emocional y motivacional.

Un terapeuta también puede ayudarte a explorar más profundamente el origen de tus creencias limitantes y proporcionarte estrategias específicas para desafiar y cambiar esos patrones de pensamiento. No subestimes el poder del apoyo social y profesional en tu viaje hacia la superación de creencias limitantes.

Este artículo es meramente informativo, en Psicología-Online no tenemos facultad para hacer un diagnóstico ni recomendar un tratamiento. Te invitamos a acudir a un psicólogo para que trate tu caso en particular.

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