Por qué tengo miedo a trabajar

1. Haber sufrido una baja por depresión. Una de las causas más frecuentes de por qué tienes miedo a trabajar es el haber desconectado de la rutina en la oficina, sumado al propio dolor de una depresión, puede hacer que la persona experimente miedo ante la idea de incorporarse nuevamente al puesto porque se siente desentrenada en las habilidades propias del cargo.
2. Haber tenido un jefe tóxico. Aquel que te corrige constantemente en todas tus acciones y que nunca te felicita por tus logros. El jefe representa el rol de la autoridad y cuando el trabajador se siente inseguro por los mensajes negativos que recibe de su jefe, esta situación afecta a su autoestima.
3. Desconocimiento del sector profesional. Una persona no siempre trabaja en el ámbito para el que se ha formado. La formación aporta una capacitación y una preparación. Por esta razón, cuando un trabajador realiza un empleo de un sector en el que no tiene formación ni experiencia, siente el temor que implica salir fuera de la zona de confort. En este otro artículo te damos algunos consejos para que puedas afrontar la inseguridad en el trabajo.
4. Exceso de perfeccionismo. Algunas personas ponen tanta responsabilidad sobre sí mismas que se culpan ante el más mínimo error. El riesgo del perfeccionismo es vivir el error desde la culpa. Y la culpa está muy vinculada con el miedo.
5. Miedo al despido. Este es uno de los temores laborales presentes en un contexto de inestabilidad económica. En ese caso, el trabajador experimenta una tensión emocional porque siente que puede ser despedido en cualquier momento. Este es otro de los motivos por los que puedes tener miedo a trabajar.
6. Una experiencia laboral negativa. Si una persona ha vivido algún tipo de experiencia traumática en el plano laboral, por ejemplo, un periodo prolongado de ansiedad en la oficina, siente miedo porque está condicionada por la influencia de esa vivencia limitante.
7. Ergofobia, o lo que es lo mismo, miedo al trabajo. Es un tipo de fobia que experimentan aquellas personas que viven como una amenaza habitual situaciones cotidianas de la rutina profesional, por ejemplo, una reunión de trabajo o una conversación con el jefe. Este diagnóstico es un tipo de trastorno por ansiedad social. El trabajador teme no saber hacer todas las tareas que le corresponden en su puesto, teme no estar a la altura de las circunstancias y le asusta recibir una valoración negativa por parte de su superior.
8. Síndrome del impostor. Existen muchos miedos vinculados al plano laboral. Por ejemplo, este síndrome del impostor que sufren profesionales con un perfil competente que tienen la creencia interior de no estar suficientemente capacitados para ocupar el puesto que tienen y temen ser descubiertos en algún signo de desconocimiento.

Es muy importante aprender a creer en uno mismo para poder sentir el trabajo como una oportunidad y una vía de crecimiento positivo.

Una vez analizadas las causas de miedo al trabajo, a continuación te damos ideas para superar estos miedos por medio de acciones concretas:

1. Normaliza los miedos. En lugar de exagerarlos hasta paralizarte, normaliza esas sensaciones de inseguridad que todos, incluso los profesionales de mayor éxito, han vivido en algún momento. El miedo positivo también puede ser una consecuencia de la conciencia de la responsabilidad del deber cumplido y de querer estas a la altura de las expectativas de la empresa.
2. Busca un apoyo emocional en el trabajo. Generalmente, de un modo natural surgen lazos de compañerismo en el plano laboral. Es natural que tengas una mayor conexión con algunos compañeros que con otros. Esas personas que son tu apoyo en la oficina, son un pilar importante para afrontar este temor. Piensa que, si en algún momento tienes alguna duda sobre alguna tarea, puedes pedir ayuda.
3. Hay muchas empresas y muchos sectores diferentes. Por tanto, confía en que, en algún momento, no solo encontrarás un puesto que te encante, sino también, una empresa en la que te desarrollas como profesional feliz. Las buenas experiencias laborales te ayudan a superar el temor al trabajo.
4. Realiza una labor de voluntariado asociada a tu labor profesional. El contexto del voluntariado está libre de las presiones asociadas a la empresa. Por esta razón, es muy posible que disfrutes de tu labor y que te relajes de otros temores que te condicionan de forma negativa en la oficina. A su vez, esta experiencia positiva también puede darte fuerza a nivel profesional.
5. Observa las situaciones desde un contexto temporal. A veces, los miedos son tan intensos que te angustian porque observas este escenario como inamovible. Intenta pensar que, tu experiencia en esta empresa, tendrá principio y final. Por tanto, relativiza esta situación a partir de esta perspectiva. Y, además, no te posiciones en un rol pasivo ante tus miedos. Puedes preparar una oposición, buscar un trabajo desde casa, elaborar un plan de búsqueda activa de empleo... En definitiva, no observes tu situación de un modo estático sino dinámico.
6. Cultiva otras esferas de tu vida. El miedo al trabajo puede paralizarte de tal forma que toda tu vida gire en torno a este temor. Realiza actividades de ocio, practica ejercicio físico, desconecta de las tareas de la oficina a través de actividades relajantes en casa. Tu trabajo es importante pero tu vida es mucho más que ese empleo. ¡Tenlo presente!

Este artículo es meramente informativo, en Psicología-Online no tenemos facultad para hacer un diagnóstico ni recomendar un tratamiento. Te invitamos a acudir a un psicólogo para que trate tu caso en particular.

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