Cómo lidiar con una sobrecarga emocional

La sobrecarga emocional se produce cuando tras vivir determinadas situaciones una persona alberga un cúmulo de emociones que, saturan a la persona debido a su carga negativa, duración prolongada y/o intensidad. Esta sobrecarga de emociones provoca que, de un día para otro, empiecen a manifestarse una serie de síntomas que indican que se ha superado los límites de tolerancia ante todo lo acontecido en su vida.

Cuando una persona se sobrecarga emocionalmente resulta fundamental que se ponga en marcha cuanto antes para afrontar y solucionar su situación personal y, en la medida de lo posible, reestablecer el equilibrio emocional en su vida. De lo contrario, la acumulación de estados de sobrecarga emocional puede provocar un desajuste y mal funcionamiento de otros sistemas vitales humanos y aumentar la probabilidad de que aparezcan otras patologías.

Existen múltiples causas que pueden dar lugar a la sobrecarga o agotamiento emocional, aunque estas pueden variar en función de cada persona. A continuación te mostramos las principales:

• Experiencias personales con carga negativa de alta intensidad: por ejemplo, perder el trabajo, separación. conyugal, pérdida de un familiar o amigo, accidente grave personal o de un ser querido, etc.
• Repetición en un breve periodo de tiempo de varios acontecimientos estresantes.
• Dificultad para gestionar las emociones.
• Incapacidad de saber delegar en los demás.
• Altos niveles de autoexigencia personal.
• Estrés en el ámbito laboral, personal y familiar y dificultad para conciliar unos con otros. En este artículo te explicamos Cómo manejar el estrés laboral.

La sobrecarga emocional repercute de un modo muy generalizado en todo el organismo, afectando de manera muy clara y específica a los diferentes sistemas vitales del organismo humano. Algunos de los síntomas más destacados que suelen darse ante las situaciones de sobrecarga emocional en función del sistema afectado son:

• Sistema muesculoesquelético: tensión y rigidez muscular, agotamiento físico, dolor de cabeza, etc.
• Sistema circulatorio: arritmia, taquicardia, hipertensión, infarto, ictus, etc.
• Sistema respiratorio: hiperventilación o dificultad para respirar
• Sistema digestivo: dolores de estómago, nauseas, vómitos, reflujo, pérdida del apetito, etc.
• Sistema nervioso: ansiedad, ataques de pánico, depresión, dificultades para dormir, irritabilidad, inestabilidad emocional, etc.

A continuación te dejamos algunas recomendaciones que te permitirán a las personas afrontar exitosamente una situación de sobrecarga emocional:

• Aprende a gestionar las emociones: primer paso principal para dejar de alimentar la sobrecarga emocional.
• Practica ejercicio moderado regularmente: nos ayudará a reducir la tensión mental, física y emocional.
• Realiza ejercicios de respiración y o de relajación: contribuirán a no seguir acumulando estrés emocional
• Mantén una dieta saludable como parte fundamental en el cuidado, recuperación y mantenimiento de la salud
• Aborda de manera positiva y constructiva los problemas que, a día de hoy, nos ocasionan la situación de sobrecarga emocional
• Desapégate de situaciones cuya resolución no depende de ti.
• Aprende a delegar aquellas situaciones que pueden ser abordadas adecuadamente por nuestros prójimos
• Esfuérzate por establecer y mantener la paz interior, a pesar de las dificultades y contrariedades externas

Por supuesto, existen muchas más opciones válidas que permitirán a las personas con sobrecarga emocional superar y vencer esta situación. Todo aquello que aminore la sobrecarga y suponga un impulso interno para seguir adelante con todo a pesar de los obstáculos existentes serán recursos de gran ayuda para descargar a estas personas, aliviarlas y fortalecerlas para seguir adelante en su camino.

Afrontar esta situación estresante de forma efectiva requerirá el cuidado, mejora y optimización de todos y cada uno de los sistemas afectados. No podemos olvidar que la interacción entre dichos sistemas es global y constante, por lo que la intervención y mejora de algunos de ellos repercutirá positivamente sobre la recuperación del resto.

Este artículo es meramente informativo, en Psicología-Online no tenemos facultad para hacer un diagnóstico ni recomendar un tratamiento. Te invitamos a acudir a un psicólogo para que trate tu caso en particular.

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