Qué son los sesgos de género, tipos y ejemplos

El significado de sesgos de género hace referencia a las actitudes preconcebidas, creencias y estereotipos que existen en la sociedad basados en el género de una persona, y que pueden influir en la forma en que se la trata y evalúa. Estos sesgos pueden ser tanto conscientes como inconscientes y pueden manifestarse en diversas áreas de la vida, incluyendo la educación, el trabajo, la salud, la cultura y la sociedad en general.

Estos sesgos pueden reforzar estereotipos tradicionales de género, como la creencia de que ciertos roles y responsabilidades son apropiados para hombres o mujeres, lo que a menudo resulta en desigualdades en áreas como el salario, la promoción laboral, el acceso a la educación y la toma de decisiones.

Existen varios tipos de sesgos de género que pueden manifestarse en diversas situaciones y contextos. Los tipos de sesgos de género más comunes son:

• Sesgo de rendimiento: se utiliza en el contexto de los sesgos cognitivos o prejuicios que pueden influir en la evaluación de una persona en función de su género, raza u otros factores. Este sesgo se refiere a la tendencia a evaluar el rendimiento de una persona de manera sesgada, es decir, a darle una calificación o juicio basado en estereotipos en lugar de una evaluación imparcial y objetiva del rendimiento real.
• Sesgo de atribución: se refiere a la tendencia a hacer atribuciones de éxito o fracaso, logro o error, en función del género de una persona. Esto significa que las personas tienden a explicar el comportamiento de hombres y mujeres de manera diferente, a menudo atribuyendo sus éxitos o fracasos a características individuales, estereotipos de género o prejuicios. En este artículo, te contamos Cómo afectan los prejuicios en la sociedad.
• Sesgo de aprecio o doble rechazo: el sesgo de aprecio se refiere a la tendencia de las personas a apreciar o valorar más positivamente las cualidades, habilidades o contribuciones de una persona basándose en su género. El término "doble rechazo" a veces se usa para describir situaciones en las que una persona enfrenta discriminación o rechazo por pertenecer a dos grupos marginados, como ser mujer y pertenecer a una minoría étnica.
• Sesgo de maternidad o paternidad: se refiere a la discriminación o prejuicio basado en la maternidad o paternidad de una persona en el lugar de trabajo. Este sesgo implica tratar a las personas de manera diferente o injusta debido a su estado de embarazo, maternidad, paternidad o responsabilidades familiares.

Reconocer estos sesgos y trabajar para abordarlos es esencial para lograr una mayor igualdad de género y una sociedad más equitativa.

Los sesgos de género pueden manifestarse en una variedad de situaciones y contextos. Aquí tienes algunos ejemplos de sesgos de género concretos:

• Sesgo de contratación: un empleador podría preferir contratar a un candidato masculino sobre una candidata femenina para un puesto de liderazgo en una empresa, basándose en estereotipos de género que asumen que los hombres son naturalmente mejores líderes.
• Sesgo de salario: una mujer y un hombre que realizan el mismo trabajo y tienen la misma experiencia podrían recibir salarios diferentes, con la mujer ganando menos que el hombre debido a prejuicios de género arraigados.
• Sesgo en la promoción: este sesgo en las empresas se manifiesta en que, a pesar de tener habilidades y logros similares, un hombre podría tener más probabilidades de ser promocionado que una mujer en una organización debido a la percepción de que los hombres son más adecuados para roles de liderazgo.
• Sesgo en la educación: los docentes podrían inconscientemente dar menos atención y apoyo a las niñas en clases de matemáticas o ciencias, lo que podría influir en su desempeño académico.
• Sesgo en la atención médica: los médicos podrían minimizar los síntomas de una paciente o no tomarlos tan en serio como los de un paciente masculino, lo que puede llevar a un diagnóstico y tratamiento deficientes.
• Sesgo en los medios de comunicación: la representación estereotipada de género en los medios puede influir en las expectativas y actitudes sociales, perpetuando roles de género tradicionales y normas de belleza poco realistas.
• Sesgo en la toma de decisiones familiares: la creencia de que las mujeres son responsables de las tareas del hogar y el cuidado de los niños puede influir en la asignación desigual de responsabilidades en el hogar.
• Sesgo en la vida cotidiana: los prejuicios y estereotipos de género pueden influir en la forma en que las personas interactúan en sus relaciones personales, desde la elección de juguetes para niños hasta la división de las tareas del hogar.

Este artículo es meramente informativo, en Psicología-Online no tenemos facultad para hacer un diagnóstico ni recomendar un tratamiento. Te invitamos a acudir a un psicólogo para que trate tu caso en particular.

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